El Juzgado de Instrucción número 1 de San Fernando ha ordenado al filo de las cuatro de la tarde de este lunes el ingreso en prisión preventiva de J.A.P.V., el hombre de 45 años que el pasado sábado intentó el secuestro de tres menores, de entre 10 y 16 años, en la avenida Duque de Arcos y que tuvo que salir de la zona escoltado por la Policía Nacional porque en torno a un centenar de vecinos estuvieron a punto de lincharlo. Se le imputa un delito de detención ilegal.
Dicho individuo ha estado alrededor de cuatro horas en los juzgados de la plaza de San José, pero ni los familiares de los niños, dos de los cuales se encontraban allí, ni los medios de comunicación han podido ver el rostro de J.A.P.V. cuando abandonaba la sala judicial, puesto que los agentes de la Policía han jugado al despiste y han logrado sacarlo por la puerta de detrás en la calle Dolores en un visto y no visto. Una actuación policial que ha indignado a dichos familiares, que no han dudado en recriminárselo a los agentes.
Los propios familiares narraban la secuencia de los hechos acaecidos el pasado sábado, cuando dicha persona llegó a la barriada y paró su coche, un Megane blanco, para pedirles a los pequeños que se metiesen con él en el mismo para marcharse a un campo donde "lo iban a pasar muy bien". Los menores se negaron y éste trató de forzarlos para que se montase en el vehículo, pero los niños lograron pedir auxilio y zafarse de él.
Pero la cosa no quedó ahí porque poco después regresó al mismo escenario y fue entonces cuando un centenar de personas rodearon el vehículo, provocándole destrozos, y también llegaron a propinar algún que otro golpe a J.A.P.V., que precisó de la intervención policial para poder salir de allí. Aún así, una vez llegó a la Comisaría precisó de asistencia médica por daños en la cara, cuello, cuero cabelludo y tórax.
En El Barrero
Sin embargo, y según ha podido conocer este medio, ese presunto intento de secuestro no era el primero que el detenido, ya en prisión, intentó de ejecutar ese mismo sábado, puesto que por la tarde también trató de llevarse a otros tres menores que se encontraban junto a otros niños y familiares celebrando un cumpleaños en el Parque del Barrero.
Fue la madre de uno de los menores la que se dio cuenta cuando los niños ya estaban con dicha persona prácticamente a la altura de unos accesos al parque. Al parecer, se los llevó con la promesa de darles agua y, en esta ocasión, llevaba consigo un perro pequeño.
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