El actual contexto socioeconómico de crisis, la facilidad de acceso y la permisividad social son, desde el punto de los expertos, los elementos que explican un importante repunte en el contrabando de tabaco.
Así lo han manifestado en una jornada sobre el papel de las redes criminales y las mafias organizadas del contrabando organizada por Altadis y que se celebra este jueves en Vigo. Con este seminario, al igual que con otros similares que se han celebrado en zonas de España consideradas "sensibles" en lo que respecta al consumo de tabaco de contrabando, se pretende "concienciar" a la ciudadanía de los "riesgos" de este producto, tal y como ha señalado la directora de Asuntos Corporativos y Legales de Altadis, Rocío Ingelmo.
En concreto, Ingelmo ha explicado que la industria tabaquera reclama medidas "ejemplarizantes" como el "cierre provisional" de establecimientos, para erradicar esta actividad o, al menos, para dificultar la distribución de tabaco que no pasa por los controles administrativos y que no pagan impuestos.
Asimismo, ha precisado que, en el caso de España, el problema no es tanto el tabaco falsificado, como la proliferación de pequeñas marcas que han sido producidas para otros mercados y, por tanto, no están gravadas en el mercado español. Según la estimación de la industria, casi el 12 por ciento del tabaco que se consume en España procede del contrabando, un cifra en aumento y que está "muy relacionada" con el hecho de que, en los últimos tres años, las cajetillas han experimentado un aumento medio de dos euros en su precio.
Por otra parte, ha recordado que las cajetillas de tabaco que no se venden en estancos o lugares autorizados, no solo no pagan impuestos y pueden ser falsas, sino que, aún siendo tabaco genuino, se corre el riesgo de que no se haya almacenado o conservado en las mejores condiciones.
Contrabandistas gallegos
En el seminario organizado por Altadis, han participado también representantes de la 'lucha' contra las mafias y redes criminales dedicadas a esta actividad. Así, uno de los responsables de Aduanas en Galicia, Hermelino Alonso, ha constatado que, en los últimos tiempos, se ha notado un "resurgir" de los antiguos contrabandistas de tabaco gallegos, en la mayoría de los casos, obligados por necesidades económicas: muchos se han quedado sin empleo legal, o necesitan "un complemento a sus ingresos".
Alonso ha señalado, no obstante, que el escenario del contrabando gallego "ha cambiado totalmente", y ha explicado que, en la actualidad, existen "grupos autónomos" que "se conocen entre ellos". "Hoy en día, Galicia es una comunidad de tabaco de contrabando procedente de Andorra, Canarias y Gibraltar", ha señalado, frente a otros momentos del pasado, en que la región gallega lideraba la 'importación' ilegal de tabaco americano.
En esa línea, otro de los ponentes de esta jornada, el magistrado titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago de Compostela, José Antonio Vázquez Taín, ha coincidido en señalar un "repunte" en el fenómeno del contrabando de tabaco en Galicia. "Es muy difícil introducirse en esas redes, por eso volvemos a ver viejas caras conocidas", ha apuntado el juez.
Según ha subrayado, esos históricos contrabandistas son los que "tienen los contactos, conocen los circuitos y tienen mucho trabajo hecho de antes". Además, ha precisado que todos los circuitos de entrada de tabaco ilegal "están abiertos", aunque hayan cambiado algunos métodos, y que el transporte en grandes contenedores sigue siendo una de las principales vías de introducción de la mercancía.
El magistrado ha explicado que, al contrario de lo que percibe la industria tabaquera, "no hay laxitud" en la persecución del contrabando de tabaco, sino que "no hay medios para luchar contra todos los problemas que hay encima de la mesa". Asimismo, ha insistido en recordar que el problema de base de esta actividad ilícita es la existencia de mafias organizadas, porque "para que una cajetilla de contrabando llegue al mercado, tiene que haber una infraestructura".
En la jornada que se celebra en Vigo, también participan otros expertos, como el coronel de la Guardia Civil, Ángel Alonso, y el director jurídico de Altadis, Ignacio Millán.
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