La defensa de José Bretón no espera "sorpresas" de la declaración de éste en esta jornada dado que se mantendrá en su misma versión que ha tenido desde el principio, de que sus hijos, Ruth y José, supuestamente desaparecieron en el Parque Cruz Conde de Córdoba capital el 8 de octubre y no los mató en la finca familiar de Las Quemadillas, según sostienen la Fiscalía y la acusación particular, ejercida por la madre de los niños, Ruth Ortiz, y que cree que la declaración de este martes "no sirve para nada".
En declaraciones a los periodistas antes de entrar en la Audiencia Provincial de Córdoba, el abogado de Bretón, José María Sánchez de Puerta, ha reiterado que su cliente seguirá con la misma versión del parque, al tiempo que considera que el magistrado presidente Tribunal del Jurado, Pedro Vela, no debería haber admitido el comentario de la letrada de Ruth, María del Reposo Carrero, sobre la pira funeraria de la finca que supuestamente también estaba destinada para la madre, además de los niños.
Mientras, la letrada de la acusación preguntada por si será este martes más contundente que este lunes, cuando aseguró que la pira funeraria estaba preparada para Ruth, ha comentado que "se hace lo que se puede" y ha manifestado que esta jornada "sabemos todos que no sirve para nada", puesto que "el caso se resolverá sin tener en cuenta a Bretón, todos los sabemos".
Sobre la declaración de este miércoles de Ruth Ortiz, Reposo Carrero supone que la madre de los niños se encuentra "mal", de hecho espera que declare con una mampara que la proteja para no ver a Bretón.
Cabe destacar que el furgón policial con Bretón ha llegado a la Audiencia Provincial sobre las 9,30 horas y se prevé que comience a declarar sobre las 10,00 horas ante el magistrado Pedro Vela y el Tribunal del Jurado por la acusación de dos delitos de asesinato con alevosía y la agravante de parentesco supuestamente cometidos contra sus hijos, Ruth y José, el 8 de octubre de 2011 en una finca familiar ubicada en las afueras de Córdoba capital.
Por estos hechos el acusado permanece interno en el Centro Penitenciario de Alcolea desde el 21 de octubre de 2011 y la Fiscalía y la acusación particular, ejercida por la madre de los niños, Ruth Ortiz, le piden 40 años de prisión, mientras que la defensa solicita su absolución.
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