El Tribunal Supremo ha confirmado la indemnización de 91.030 euros que recibirán unos padres por la muerte de su hijo, que falleció electrocutado cuando limpiaba una piscina y el barredor de fondos formó un arco voltaico con una línea de alta tensión que discurría por encima de la finca.
El accidente ocurrió el 17 de julio de 2004 en la urbanización El Corzo de Sevilla, cuando un joven de 24 años recibió una descarga eléctrica porque el mástil del barredor de fondos que utilizaba entró en contacto con la línea de alta tensión.
Una sentencia del Tribunal Supremo, a la que ha tenido acceso Efe, confirma la condena dictada por la Audiencia de Sevilla contra la compañía eléctrica Endesa y rechaza su pretensión de que la comunidad de propietarios de la urbanización fuese declarada responsable de la indemnización.
Según el Supremo, aunque la comunidad de propietarios figurase como "formal titular" de la línea causante del siniestro, Endesa era la responsable de sus medidas de seguridad, era quien explotaba el tendido y se servía de él para suministrar electricidad no solo a la urbanización donde ocurrió el siniestro, sino más allá de las parcelas.
La línea de alta tensión estaba a 4,80 metros del suelo y "no se ajustaba al reglamento de líneas aéreas de alta tensión", aspecto que quedó fuera de discusión en la sentencia de un juzgado de primera instancia de Sevilla y luego de la Audiencia provincial, recuerda la Sala Civil del alto tribunal.
Endesa "era la encargada del control de seguridad mediante personal especializado y conocimientos técnicos precisos, al ser una empresa distribuidora de energía eléctrica", dice el Supremo, y como tal era su responsabilidad "mantener la línea en condiciones idóneas".
El fallo del Supremo confirma también la cuantía de la indemnización, que será incrementada en el interés legal, porque es el fijado para los accidentes de tráfico y frente a la primera petición de los padres del accidentado, situada en 174.200 euros.
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