Un terremoto de magnitud 5,7, que ha llegado a sentirse en la capital de India, Nueva Delhi, ha sacudido Afganistán este miércoles, convirtiéndose así en el último de una serie de seísmos que se han producido durante la última semana en el continente asiático.
El terremoto, cuyo epicentro se encuentra a 25 kilómetros al noroeste de Jalalabad, en el este de Afganistán, se ha producido a 64,3 kilómetros de profundidad, según ha informado el centro sismológico de Estados Unidos, el USGS. Por el momento, no hay datos sobre el número de víctimas o sobre daños materiales.
Los edificios de la capital india se han balanceado mientras la gente se precipitaba a las calles en la región de Cachemira, en el norte de India, donde un terremoto mató a unas 75.000 personas en 2005, la mayoría de ellas en el lado paquistaní. El seísmo de este miércoles también ha podido sentirse en la capital de Pakistán, Islamabad.
La semana pasada, un terremoto de magnitud 6,6 mató a unas 200 personas en el suroeste de China pocos días después de que un seísmo de magnitud 8 acabara con la vida de 35 personas en Pakistán, cerca de la frontera con Irán.
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