Quedan seis batallas para terminar la guerra en el Grupo IV de Segunda B.
Aún ninguno de los implicados en la quema han dado su brazo a torcer, salvo el filial bético, que permanece en la última plaza de la tabla con una desventaja de catorce puntos respecto al equipo que marca la salvación. El resto, nueve equipos luchando por eludir los tres últimos trenes del descenso.
San Roque de Lepe y Villanovense se citan este sábado a partir de las 17:30 horas en tierras pacenses, donde ambos conjuntos tratarán de conseguir tres importantes puntos para acercarse al objetivo de la permanencia.
El plantel lepero, decimoctavo en la tabla clasificatoria con 34 puntos, acumula ya nueve jornadas sin conocer la victoria y mantiene una desventaja de tres puntos respecto a la promoción de descenso y de cuatro frente al Arroyo, que marca la salvación. Los locales, por su parte, esperan hacer bueno el último empate logrado a domicilio ante el RB Linense, para intentar escalar posiciones en la tabla y evadirse de la promoción de descenso, que actualmente ocupa con 37 puntos.
La única baja del cuadro sanrroquista será la del ghanés Mohamed Fatau, quien se desvaneció en los minutos finales del último encuentro ante el San Fernando y aún permanece en proceso de recuperación. Ganar o ganar para no despedirse de la categoría de bornce.
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