Las distintas asociaciones y entidades que se han posicionado contra las modificaciones que afectarán al uso del edificio de la antigua comisaría de la Gavidia y, sobre todo, a la creación de aparcamientos rotatorios en el centro histórico tienen un mes de plazo para presentar alegaciones a los cambios provisionales que introdujo el PP en el Pleno del pasado mes de febrero.
Ambas modificaciones del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Sevilla, cuya exposición pública ha sido confirmada por el Ayuntamiento a Europa Press, han sido muy criticadas por la oposición (PSOE e IU), pero también por numerosas entidades sociales, que incluso se han unido en una plataforma en el caso de la posibilidad de crear aparcamientos rotatorios “intramuros”, es decir, en pleno casco histórico, cuyo modelo de progresiva peatonalización y recuperación de espacios públicos se ve ahora truncado.
Las dos modificaciones, especialmente la referida al cambio de uso del suelo de la antigua Comisaría de la Gavidia de “interés público” a comercial, deberán contar posteriormente con el informe favorable de la Junta de Andalucía, por lo que al PP, como es bien sabido, no le vale la mayoría absoluta que ostenta en el Ayuntamiento.
Ambas medidas suponen un cambio en el modelo de movilidad instaurado en el PGOU, que apostaba por aparcamientos disuasorios “extramuros” del centro, al que se accedería por otros medios públicos, unas plazas de estacionamiento que el PP entiende, y parte del sector comercial, que serían necesarias para el nuevo centro comercial que se instalaría en la Gavidia y que, según ha afirmado el Ayuntamiento en varias ocasiones, ya cuenta con una empresa interesada en explotar la antigua comisaría.
La modificación del PGOU, sin embargo, ha contado siempre con la clara oposición de los dos grupos que conformaban antes el Gobierno municipal (PSOE e IU) pero también de una plataforma creada exprofeso para luchar contra los nuevos aparcamientos rotatorios.
Además, las críticas no sólo se han centrado en el fondo de estas modificaciones (el fin del modelo de ciudad sostenible del PGOU) sino también en la falta de consenso o la improvisación que ha caracterizado a Urbanismo y que la semana pasada el PSOE volvió a recordar después de que la Gerencia se viera obligada a retirar la propuesta para introducir una excepción para equipamientos deportivos, motivada por el fracaso de la instalación de Decathlon en el Estadio Olímpico.
“Estamos de acuerdo con hacer esta parcela más atractiva, pero no podemos compartir este modelo de urbanismo sin rigor y de parcheo del PGOU”, decía el socialistas Antonio Muñoz, comparándolo con la Gavidia y los parkings rotatorios.
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