El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, se ha comprometido este jueves ante el Pleno del Parlamento al desarrollo del artículo 78 del Estatuto de Autonomía, donde se regula la posibilidad de desarrollar consultas populares.
Concretamente, ese artículo indica que "corresponde a la Junta de Andalucía la competencia exclusiva para el establecimiento del régimen jurídico, las modalidades, el procedimiento, la realización y la convocatoria por ella misma o por los entes locales en el ámbito de sus competencias de encuestas, audiencias públicas, foros de participación y cualquier otro instrumento de consulta popular, con la excepción del referéndum".
Griñán ha hecho este anuncio en respuesta a una pregunta del portavoz de IULV-CA en el Parlamento, José Antonio Castro, quien ha señalado que para su formación el desarrollo de consultas populares sobre las políticas de un gobierno es igual "a democracia con mayúsculas" y ha defendido incluir este instrumento en la futura Ley de Participación Ciudadana.
Ante las críticas que IULV-CA está recibiendo desde las filas del PP-A, Castro ha querido dejar claro que su formación prefiere "mil veces antes el chándal de los trabajadores que las corbatas y los puños blancos manchados de corrupción y de cuentas en los paraísos fiscales".
José Antonio Griñán ha indicado que, sin duda, vivimos un momento crítico que afecta a la economía y a la política porque se produce una fractura del lazo democrático entre representantes y representados, expresado en la desconfianza de la ciudadanía hacia la política y lo público. Ha manifestado que de ello son muchas las causas, como la corrupción o la degeneración del cuerpo político, pero también son numerosos los remedios.
En este punto, ha situado la futura Ley de Transparencia de Andalucía, que estará elaborada en el próximo mes de abril, apuntando que la transparencia es el mejor instrumento para ganar prestigio y credibilidad en la política y en lo público. Ha indicado que esa transparencia no puede entenderse como el mero deber de información por parte de las administraciones, sino que tiene que ir acompañada del reconocimiento de los derechos concretos de participación de los ciudadanos. Ha indicado que no solo se trata de evitar abusos de poder, sino de hacer al pueblo más participativo en la cosa pública.
Griñán ha abogado por el consenso de todas fuerzas políticas, porque hay que "unir voluntades y sumar esfuerzos para avanzar en este camino". "Este no es un debate para establecer jerarquías morales, sino para fortalecer la democracia a la que todos llegamos y en la que todos estamos con los mismos títulos de crédito", ha apuntado.
Ha considerado fundamentales compromisos explícitos de transparencia que se pongan en marcha de forma progresiva, que afectarán a la transparencia personal de los cargos públicos, a los partidos, a las administraciones, a las cuentas públicas y a la capacidad de los publico para garantizar a los ciudadanos la transparencia en el ámbito de la regulación económica.
CHÁNDAL Y CORRUPCIÓN
Por su parte, el portavoz de IULV-CA ha señalado que hablar de transparencia se ha convertido casi en una obligación en este país porque la derecha que representa el PP intenta "tapar descaradamente sus vergüenzas". Ha indicado que para el PP cualquier cosa es hablar de transparencia, "excepto hablar de Bárcenas".
Ha indicado que no es de extrañar que la futura Ley de Transparencia estatal no incluya ni a la Iglesia ni a la Corona, la institución más opaca que existe en España. Ha indicado que mientras que en Andalucía se trabaja para ver como acercamos el poder al pueblo, "el PP quiere devolvernos a un escenario preconstitucional con la reforma local" que ha puesto sobre la mesa.
Tras señalar que para su formación las consultas populares son igual "a democracia con mayúsculas", José Antonio Castro ha preguntado al PP-A, en particular, y al resto de formaciones, en general, que aclaren a "¿qué temen, al pueblo, a sus opiniones?".
En su opinión, "no hay que tenerle miedo a la voz del pueblo" y ha garantizado que IULV-CA va a defender con todos sus recursos la posibilidad "de que Andalucía cuente con ese instrumento de consulta para gobernar con la gente", aunque el PP piense que se es "populista o que nos gusta ir en chándal".
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