El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes aprobado un Real Decreto por el que se establecen las servidumbres aéreas del helipuerto de la Población Militar de San Carlos en San Fernando.
El Gobierno ha recordado que las servidumbres aeronáuticas tienen como objetivo fijar limitaciones de altura o de emisión de humos, nieblas o cualquier otro fenómeno que suponga un riesgo a cualquier tipo de construcción en los alrededores de un aeródromo, con el fin de garantizar la seguridad de las aeronaves en sus maniobras de aterrizaje y despegue, así como para evitar interferencias en las señales radioeléctricas que reciben comunicaciones y/o ayudas a la navegación.
En julio de 2012 se clasificaron como helipuerto permanente de uso militar las instalaciones aeronáuticas de la Armada en la Población Militar de San Carlos, por lo que era necesario establecer las servidumbres aeronáuticas del Helipuerto de la Población Militar de San Carlos, que es utilizado, tanto para vuelos ordinarios, como para evacuaciones urgentes.
Este helipuerto dispone de un área de aterrizaje y despegue con unas dimensiones de 50 metros de longitud por cincuenta metros de anchura, más diez metros a cada lado de la misma, y no dispone de instalaciones radioeléctricas ni radioayudas a la navegación.
El helipuerto, independientemente de su misión, ha sido precisamente uno de los grandes problemas para la aprobación del Plan Especial de Reforma Interior (PERI) de los terrenos de la antigua Fábrica San Carlos y una de las historias más rocambolescas en las relaciones (malas) entre administraciones.
Primero no se contempló en el proyecto para urbanizar los terrenos de la antigua constructora.Luego la ex secretaria de Infraestructura de Defensa, Mónica Melle, dijo que ya no se iba a construir y que no era necesario pintarlo en el PERI cuando el helipuerto ya llevaba un año construyéndose y finalmente se ha aceptado por el Gobierno municipal la adecuación del Plan una vez aclaradas las dudas.
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