El Algeciras aprovechó la oportunidad para ser líder que se le brindó tras las derrotas de Mairena y Córdoba B. Y lo hizo a lo grande, minimizando al Conil y ofreciendo una manita a su afición y, sobte todo, la imagen de equipo sólido que se le venía reclamando.
Los albirrojos, muy implicados desde el arranque, cuajaron una actuación coral magnífica y se mostraron sin fisuras, que no rígidos, ya que tanto Marín, ayer en el lateral derecho, como Merino subieron constantemente, con Berlanga haciendo de ancla en el centro del campo –echando una mano atrás a Mena y Víctor González en las subidas de los laterales– para dar libertad a Javi Chico, Narváez y los dos extremos, Willy y Javi Fernández.
Enchufados desde el primer segundo de juego, los albirrojos encontraron también muy pronto el camino del gol. El primero, en el 6’, Willy se marca un carrerón tras un córner del Conil y sirve a Miguel ,que marca de tiro raso. Miguel repitió a la media hora, esta vez tras recibir un gran pase de Narváez e irse del portero, Kiko, el mejor del equipo rival ayer.
Berlanga, con un par de remates de cabeza, pudo hacer la diferencia mayor antes del descanso, pero al Algeciras le bastó con acaparar el balón, sin perder la cara a la portería rival, para terminar de sacar del partido a un Conil que con el paso de los minutos se fue diluyendo en medio del torbellino albirrojo, que arreció durante la segunda parte para terminar de engalanar la fiesta por el liderato.
Doce minutos letales
En la reanudación el Algeciras salió decidido a regalarse un triunfo de los grandes, de los que te permiten meterte a la afición en el bolsillo. Así, una tras otra caían las ocasiones de Narváez, Willy –con un paradón de Kiko con el pie– y Javi Fernández, en dos ocasiones. Se intuía el tercero, que llegó desde el punto de penalti después de que Juan María derribase a Willy cuando trataba de hacerse con un rechace. Javi Chio lo materializó.
Era el minuto 65’, el que abrió un paréntesis de doce minutos en los que los algecireños redondearon su goleada. Primero Willy encontró el premio a su gran actuación tras robarle el balón a un defensa y batir a Kiko por entre las piernas. Eso, en el 75’, dos minutos antes de que Narváez, tras recibir un gran pase en largo de nuevo de Willy, conectó una pared con Juanca antes de marcar.
El Algeciras alcanza el liderato tras una tarde en la hizo méritos para ello, anulando a un rival inferior que quedó reducido a nada frente a un equipo avasallador.
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