El Grupo Municipal de Izquierda Unida, en su balance anual, ha destacado el incumplimiento de las promesas del PP que hubieran posibilitado el desarrollo social del municipio, como punto más relevante.
A este respecto, han criticado que no se haya inaugurado aún la residencia para los mayores de la ciudad, el primer centro de gestión pública con el que contaría el municipio, que la zona del Francisco Norte esté siendo siendo objeto de especulación por parte de empresas implicadas en Malaya. Además las piscinas de Miraflores y Fuente Nueva, aún cerradas, y por supuesto, como el proyecto que según la coalición mejor ilustra esta dinámica, el Puerto de La Bajadilla.
En la coalición han hecho un llamamiento a la movilización y la resistencia ante la pérdida de derechos que está experimentando la sociedad española, y marbellí en particular.
Han llamado la atención sobre el nivel de endeudamiento que hace del Ayuntamiento una administración prácticamente "insolvente", dicen, y han recordado que para paliar el déficit de las arcas, el gobierno local se ha visto obligado a aumentar los precios y tasas públicas un 2,7.
El portavoz municipal de la formación, Enrique Monteroso, considera al equipo de Gobierno "incapaz de hacer frente a una deuda de unos 500 millones de euros que generaron los gobiernos del GIL, pero también seis años de mala gestión del PP, cuyo máximo responsable, Carlos Rubio, se ha dedicado a maquillar las cuentas para ampliar ficticiamente los niveles de gasto y endeudamiento”.
Monterroso ha incidido también en que “los ingresos por la especulación, es decir, por la construcción han bajado, como también lo ha hecho la recaudación de los ingresos procedentes de las infracciones y la no revisión de licencias que hay que normalizar al amparo del PGOU. De los 1.600 inmuebles que regularizar solo se ha legalizado el 5%”, ha añadido el edil.
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