Hace apenas unas semanas recibieron una noticia que, en honor a la verdad, a nadie pilló por sorpresa. Transcurrido el tiempo empiezan a encajar que aquello que empezó siendo un sueño está ya a punto de materializarse en feliz realidad. El próximo 12 de enero, dos agrupaciones de la zona sur compartirán el gozo de ser erigidas en hermandades de penitencia. A partir de entonces, podrá hablarse ya de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús de la Salud, Nuestra Señora de las Aguas, San Rafael y San Gabriel, con sede en San Rafael; y de la Hermandad del Santísimo Sacramento y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Sed y Amparo de María Santísima, que tendrá su casa en la parroquia de San Juan Grande y Nuestra Señora de la Candelaria.
Antonio Gómez e Ismael Alba, que presiden las todavía agrupaciones de La Salud y La Sed, respectivamente, coinciden al destacar la “ilusión” con la que se está viviendo esta espera. Ambos han cerrado prácticamente el traslado de las imágenes titulares a la Catedral, que se llevará a cabo en la tarde del viernes 11 de enero, de modo sencillo y por el camino más corto. El crucificado y el nazareno se encontrarán en la rotonda de Cuatro Caminos, recorriendo juntos el último tramo de este itinerario hacia la Catedral. De camino, saludarán a la Hermandad del Perdón, que celebra su cincuentenario fundacional.
Monseñor Mazuelos presidirá el sábado 12 una solemne eucaristía en la que se dará carta de naturaleza a sendas hermandades. Posteriormente, las imágenes volverán a sus respectivos templos del mismo modo en que habrán de llegar un día antes a la Catedral.
Pero ya se trabaja en el Sábado de Pasión, porque será entonces cuando ambas cofradías realicen su primera estación de penitencia. La Salud tiene claro que los hermanos no vestirán la túnica nazarena, pendiente aún de aprobación por el cabildo. La Sed trasladó esta cuestión al cabildo el pasado sábado, decidiéndose que será en 2014 cuando el cortejo vista el hábito inspirado en la congregación de Teresa de Calcuta.
En ambos casos sí parece claro que las estaciones de penitencia se llevarán a cabo en la ermita de San Telmo y la parroquia de San Miguel, respectivamente. Ello no supondrá que el Señor de la Salud y el Cristo de la Sed se dejen ver por el centro de la ciudad. “Había muchas ideas e incluso se propuso adentrarnos por el barrio de San Miguel, pero queremos estar en nuestro barrio, entre otras cosas porque alejarnos supondría añadir más de una hora de recorrido y sería excesivo porque ya estamos cinco horas en la calle. Ya habrá tiempo de estar más tiempo el día de mañana”, apunta el presidente de la todavía agrupación de San Rafael.
El caso de La Sed es un poco más complejo, teniendo en cuenta que tiene previsto hacer estación en un templo, el de San Miguel, que ya el Sábado de Pasión recibe al Señor de la Humildad y Paciencia. También en este caso la cofradía evitará el callejeo para no alargar en exceso su itinerario ni alejarse del barrio. “La idea es salir sobre las seis de la tarde y no recogernos más allá de las doce”, explica Ismael Alba.
Los censos de ambas agrupaciones parroquiales invitan a pensar en una importante nómina de cofrades una vez que sus respectivos proyectos empiecen a consolidarse. La Sed cuenta con 170 hermanos y La Salud con 235. Y ambas radican en el distrito sur, ese que no conocía de presencias cofradieras y que ahora ve cómo sus jóvenes empiezan a coronar sus sueños.
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