El hallazgo del cadáver tuvo lugar poco antes de las 19.00 horas, según fuentes cercanas al caso. Rápidamente se personaron en el lugar efectivos de la Policía Local y Nacional, que cortaron el tráfico entrante a la citada calle y acordonaron la zona para evitar el paso de los transeúntes. Multitud de curiosos aguardaban tras la cinta policial mientras las fuerzas y cuerpos de seguridad procedían a la toma de pruebas y sacaban al hombre del vehículo, un Peugeot antiguo con matrícula B 2331 NZ.
Precisamente ese vehículo era todo lo que poseía el fallecido, según informó ayer el director de la oficina de Rastro Betel en Algeciras, Manuel Hidalgo. Se da la circunstancia de que la víctima permaneció durante las últimas semanas en las oficinas de la entidad de acogida, realizando labores de pintura. Hidalgo agregó que Antonio Ruiz abandonó la sede el día antes de su muerte, que en los últimos días se le había agravado una severa enfermedad del corazón y que llevaba unas mallas adosadas a su vientre para ocultar las graves consecuencias que el alcoholismo había provocado en su cuerpo.
Pasado
Según explicó el director de Betel, Ruiz era natural de San Pedro de Alcántara (Málaga), estuvo casado y tenía dos hijos. Sus problemas de alcoholismo le habían llevado a perderlo prácticamente todo, y sin residencia donde hospedarse, el único lugar donde podía hallar cobijo tras su salida de Betel era el coche. Por esta razón, Hidalgo cree que pudo pasar la noche anterior y sus últimas horas en el turismo antes de que le llegase la muerte, bien por una sobredosis o por el corazón.
Unas dos horas después del hallazgo tuvo lugar el levantamiento del cadáver. Con toda probabilidad, durante la mañana de hoy tendrá lugar la realización de la autopsia.
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