El Partido Popular de Algeciras, a través de su vicesecretaria Juana Cid, tras las declaraciones vertidas por el concejal del Partido Socialista Miguel Alberto Díaz contra el alcalde de la ciudad, ha mostrado su rechazo a las mismas asegurando que el tono y el talante de estas declaraciones del PSOE se descalifican por sí mismas, y vienen a demostrar que pretenden llevar su política de oposición a una vorágine de insultos en la que el PP no va a entrar.
El Partido Popular, recuerda, ha sido elegido por los algecireños para trabajar por Algeciras, no para descalificar a nadie, como viene siendo la tónica habitual en el Partido Socialista. Los populares insisten en que ya se sabe cuál es la opinión que tienen los algecireños de este personaje y de todos sus compañeros en la lista, una opinión muy diferente a la de la lista que lidera José Ignacio Landaluce, y que hace que PP y PSOE estén en sitios muy distintos.
Miguel Alberto Díaz debería hacer un ejercicio de autocrítica a la hora de valorar los resultados obtenidos por el Partido Socialista en las últimas elecciones municipales, cuando su entrada en las filas del PSOE fue calificada como “el fichaje estrella” de cara a esos comicios. Su llegada a la política municipal activa le supuso al PSOE los peores resultados de su historia a pesar de que precisamente fue incluido como "fichaje estrella". El concejal socialista debería valorar si, a lo mejor, estos resultados fueron debidos a la opinión que los algecireños tienen de él y de quienes le acompañan en la lista, que han entrado en una espiral de graves insultos que ponen de manifiesto los problemas internos del PSOE, que parece creer que es más líder quien más insulta.
El gobierno de la nación y José Ignacio Landaluce como diputado tienen que respaldar sus acciones políticas, y muchas de las medidas tomadas por el Gobierno de Mariano Rajoy no se hubiesen tomado si la situación del país fuese otra, pero la herencia recibida es de absoluta bancarrota y gravísimo déficit, una herencia que se repite en Algeciras y que desde el Partido Popular en el Gobierno municipal se está resolviendo. Basta recordar el Swap, acuerdos sobre la depuradora, la municipalización de servicios como el Cementerio o el mantenimiento de colegios, que tenían un coste irracional para las arcas municipales y que gracias a la labor del PP al frente de la gestión del Ayuntamiento se están resolviendo, sin olvidar el abandono de las políticas de despilfarro que tienen en sus máximos exponentes en el rocódromo, arreglos de calles innecesarios, bicicletas inservibles, comilonas y un largo etcétera habituales en lo que el PSOE gusta llamar “políticas de izquierdas”.
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