La compañía Apple ha pagado 60 millones de dólares (47,5 millones de euros) a la compañía Proview Technology (Shenzhen) para poner fin a una disputa sobre la marca iPad en China, en la que la compañía estadounidense se vio involucrada.
La demanda ha dificultado las ventas y ha retrasado el lanzamiento del nuevo iPad en China. Antes del lanzamiento, Proview Technology había solicitado a los vendedores en decenas de ciudades del país que retiraran todos los iPads de sus estantes.
El nuevo acuerdo entre Apple y Proview Technology ha sido anunciado en la página web del Tribunal Popular Superior de la provincia de Guangdong y permitirá a Apple seguir adelante con la venta de su 'tablet' en uno de sus mercados más importantes, han asegurado los analistas.
"El acuerdo es una gran noticia para Apple. Simplemente les permite seguir con su negocio. El nuevo iPad ha llegado tan tarde al mercado de China que, si se retrasaba por más tiempo, Apple podía llegar a perder un poco más de cuota de mercado", ha asegurado Teck-Zhung Wong, un analista de la firma de investigación IDC.
Apple y Proview Technology (Shenzhen) han estado negociando para llegar a este acuerdo después de que el tribunal llevase a cabo una audiencia inicial el pasado mes de febrero. El tribunal determinó que Proview Technology era la propietaria del nombre en China.
Por su parte, los de Cupertino no han querido hacer comentarios acerca del nuevo acuerdo.
El iPad domina el mercado chino de los 'tablets' con más del 70 por ciento del mercado, aunque los Lepad de Lenovo y los Galaxy Tab de Samsung han ido ganando terreno.
Apple está experimentando un crecimiento vertiginoso en la Gran China -China, Hong Kong y Taiwán- durante el segundo trimestre. Las ventas en la región han llegado a los 7.900 millones de dólares (6.258 millones de euros). Desde el lanzamiento del iPad en el tercer trimestre de 2010 a marzo de este año, Apple ha vendido más de 6 millones de iPad en China, de acuerdo con IDC.
Para Proview y sus acreedores, el acuerdo debe ser bienvenido, según han asegurado los abogados.
Los 60 millones de dólares se abonará en una cuenta que el propio tribunal ha designado y que se utiliza para pagar a los acreedores de Proview, según ha asegurado una fuente familiarizada con la situación.
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