El tenista suizo Roger Federer se clasificó para la tercera ronda de Roland Garros, segundo 'grande' de la temporada, después de superar al rumano Adrian Ungur, que infligió el primer susto del torneo al de Basilea.
El helvético llevaba camino de firmar un estreno plácido después de haber ganado con solvencia las dos primeras mangas, ofreciendo un mejor tenis que en su estreno ante el alemán Tobias Kamke, pero no sentenció a su rival, que le arrebató el tercer set y le obligó a jugar un cuarto antes de caer finalmente por 6-3, 6-2, 6-7(6) y 6-3 tras casi dos horas y media de partido.
El tercer favorito estuvo a buen nivel en la Philippe Chartrier en el inicio del partido, sobre todo con su servicio, funcionando mejor que en su primer encuentro y con el que firmó un total de 15 saques directos. Así no ofreció oportunidades al verdugo de David Nalbandián, que perdía el paso rápidamente y cedía el primer parcial sin oponer demasiada resistencia.
Federer continuó dominando cómodamente el choque, sobre todo a la hora de controlar sus habituales numerosos errores no forzados en la arcilla roja y un tempranero 'break' le bastaba para asegurar la segunda manga a su favor.
En cambio, el panorama cambió en la tercera. Ungur se quitó los complejos, empezó a castigar el revés del campeón en 2009 y con más tranquilidad logró equilibrar el juego ante un rival que pecaba de algo de relajación que le acabó costando caro. Con 4-5 a favor del rumano, este gozó de un 15-40 que levantó el de Basilea, que se vio obligado a jugar una 'muerte súbita' donde perdonó a su rival, que salvó dos bolas de partido y encadenó cuatro puntos consecutivos para llevar el partido al cuarto set, donde Federer rompió nuevamente rápido y se olvidó de problemas.
Por otro lado, otro de los favoritos a llegar lejos en París, el argentino Juan Martín del Potro, también sufrió para pasar a la tercera ronda después de ganar en cuatro mangas al francés Edouard Roger-Vasselin por 6-7, 7-6, 6-4 y 6-4.
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