El Ayuntamiento isleño pone "a cero" el contador de las deudas que mantenía con los 555 proveedores y cuyo importe supera por poco los 19 millones de euros. De esta manera definía el alcalde isleño, José Loaiza, el Pleno extraordinario celebrado en la mañana de este martes en el Centro de Congresos en el que se ha aprobado la solicitud de un préstamo por dicha cantidad, además de un reconocimiento de deuda de tres millones de euros, algunas de los años 90, que se incluyen dentro de esos 19 millones de euros que se van a pagar con el préstamo.
Señalar que casi la mitad de ese dinero, como ya adelantó este medio, será para pagar a la empresa de limpieza y recogida de basuras Urbaser (9,4 millones de euros), además de que de los tres millones de deuda reconocida, uno será para la anterior concesinaria del mismo servicio, es decir, Cespa. Por tanto, señalar que entre ambas copan el 55 por ciento del total del pago a proveedores.
La aprobación de la solicitud del préstamo salió adelante con trece votos a favor, diez en contra y dos abstenciones; mientras que en el caso del reconocimiento de deuda fue aprobado con trece votos a favor y doce en contra. Llegados a este punto, hay que recordar que la deuda total del Ayuntamiento con los proveedores alcanza los 22 millones de euros, pero que hay unos tres millones de euros de empresas que no se han acogido a este plan de ajuste. En este sentido, el delegado de Hacienda, Manuel Raposo, ha indicado que el Ministerio de Hacienda ha abierto una segunda remesa para las empresas que estén interesadas a acogerse a este segundo plan.
En cuanto a lo que fue el debate político, el primero en tomar la palabra fue el portavoz de Izquierda Unida, Pedro Reyes, que pidió al delegado de Hacienda que aclarase dónde ha ido a parar el dinero que se recauda por las tasas de basura y alcantarillado, porque entiende que con la aprobación del préstamo el ciudadano va a pagar doble por ambos servicios. Al respecto, Raposo aseguró que "no hay un doble pago" y que el con el dinero de dicha tasas no se ha dejado de pagar a dichas empresas.
Reyes también insistió en conocer de qué manera afecta al plan de ajuste los 7,8 millones de euros del desfalco, ya que de no haber desaparecido ese dinero de las arcas municipales, la deuda que se mantiene con los proveedores no sería actualmente de 22, sino de 14 millones de euros.
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos por San Fernando, Javier Cano, criticó que el plan no se haya negociado con la oposición, que la deuda con los proveedores es consecuencia de "una mala gestión" y que recela de que el plan vaya a tener los resultados apetecidos.
El tercer turno de palabra fue para el concejal del PSOE, Fernando León, quien tiró de calculadora para señalar que el pago de esos 19 millones de euros del préstamo le supondrá a la ciudad un desembolso de 2,4 millones al año durante los próximos diez años, sumándoles los intereses. En este sentido, se quejó de que el pago de dicho dinero se vaya a conseguir subiendo el IBI un diez por ciento o el agua un 19,73 por ciento, pese a la delicada situación económica de la gran mayoría de los hogares isleños.
Por último, Raposo también hizo sus cuentas para aclarar esos 2.000 puestos de trabajo que según él se van a poder conservar gracias al plan de ajuste. Así, por un lado están los 555 de los proveedores que van a cobrar; más unos 450 empleados en las plantillas de dichos proveedores; el personal de las empresas de servicio, y los empleados de las empresas auxiliares.
Señalar que la sesión plenaria estuvo marcada de nuevo por la presencia en la sala de funcionarios municipales quienes, pancarta en mano, protestaban por los recortes anunciados por el Ayuntamiento e invitaban al alcalde a sentarse a negociar.
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