En conferencia de prensa, Soto ha acusado a Griñán de "falta de capacidad de negociación, de liderazgo y de gestión" y ha achacado la devolución de las transferencias relacionadas con el río al Gobierno central a la "irresponsabilidad y el desgobierno" del PSOE en la región.
Igualmente ha lamentado que se hayan perdido tres años en la gestión de la cuenca hidrográfica, que en ese periodo hayan dejado de invertirse en ella mil millones de euros y que ochocientos trabajadores hayan quedado en situación de "inseguridad jurídica", además de no haberse mantenido ningún diálogo con los sectores implicados, como los agricultores.
Tras recordar que el PP andaluz ha pedido un pleno parlamentario monográfico para que "se depuren las responsabilidades políticas" y conocer en qué quedará la Agencia Andaluza del Agua, Soto ha asegurado que si su partido llega al Gobierno apostará por un modelo de gestión del río totalmente distinto, basado en la profesionalización, en la estabilidad de las políticas del agua y en el diálogo con todos los afectados.
Por otra parte, Soto ha denunciado recortes sociales efectuados por la Junta en la aplicación de los derechos de dependencia, al asegurar que está revisando de oficio muchos casos, entre los que puso como ejemplo, el de una señora que tras años con 90 horas mensuales de ayuda a domicilio ha pasado a tener 55.
Hay cientos de casos similares, según Soto, quien ha pedido que "Griñán, rey de los derechos sociales, explique cómo una persona está mejor con 94 años que cuando tenía 89", en alusión a estas revisiones que ha considerado "recortes", padecidos además por la población más vulnerable.
Estos casos llegan "en cascada" al PP, la mayoría de personas entre 85 y 93 años, según Soto quien también ha asegurado que los expedientes de dependencia con derecho a mayor protección están paralizados desde el pasado 1 de enero y que las solicitudes ni siquiera se están contestando.
Respecto a la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), Soto ha pedido al PSOE andaluz que tenga con ella la misma actitud que el PSOE nacional con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), por considerar ilógico que un partido que ha perdido las elecciones municipales, el PSOE, gobierne el órgano del municipalismo andaluz.
De continuar los socialistas al frente de la FAMP, ha advertido Soto, "Andalucía será el único caso en toda España en que este organismo esté presidido por el partido que no ha ganado las elecciones".
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