La operación comenzó cuando agentes del SEPRONA observaron en una nave de Utrera a varios trabajadores que estaban demoliendo la estructura de la nave y que carecían de medidas de prevención de riesgos laborales.
Los agentes pidieron la documentación a los trabajadores y cuando comprobaron los datos, descubrieron que el nombre de uno de ellos no se correspondía con la persona identificada con esos datos, por lo que procedieron a su inmediata identificación.
Una vez que la Guardia Civil realizó las pesquisas oportunas descubrió que no existía autorización del dueño de la finca para la demolición, ni había licencia de obra, ni siquiera el encargado tenía dado de alta a los trabajadores.
Los detenidos son R.V.S., al que se le han imputado los supuestos delitos de robo con fuerza en las cosas y contra el derecho de los trabajadores; J.P.G.,imputado por dos delitos de robo con fuerza y usurpación del estado civil.; y J. J. P. P. y J. P, imputados por robo con fuerza en las cosas.
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