La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, impone de igual forma al acusado, I.Q.F., la prohibición a aproximarse a menos de 100 metros a los repartidores a los que ha robado.
Tampoco se podrá comunicarse con estas personas durante los próximos tres años, según indica la sentencia.
El juez también ha dictaminado que, además, deberá de pagar las costas judiciales ocasionadas en el proceso e indemnizar con 92 euros por responsabilidad civil.
Los hechos ocurrieron cuando el acusado, guiado por el ánimo de ilícito beneficio, asaltó con una navaja a los repartidores de pizzas quitándoles el dinero que llevaban en ese momento encima.
Así, el 11 de abril sobre las 23,30 horas cuando un repartidor iba a entregar un pedido fue abordado por I.Q.F., a quién acompañaban otras dos personas y con una navaja que portaba el acusado, le exigieron que les entregase el dinero que llevaba, que eran 82 euros.
Asimismo, el 15 de abril en otro punto de la ciudad el acusado volvió a repetir la misma actuación, aunque en esta ocasión usó un hierro y consiguió llevarse diez euros que tenía el repartidor para el cambio.
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