Según ha indicado el consejero, el jardín alberga hasta el momento una colección de 50 especies de plantas cuyo uso se vincula con diversas tradiciones culinarias y medicinales de Andalucía, con lo que también se contribuye con este proyecto a la "difusión y recuperación de la identidad y las costumbres populares" de la región. De este modo, en él pueden encontrarse cultivadas plantas como el hinojo, la hierbabuena, el sándalo de jardín, el ricino o la manzanilla alemana, cuyo uso en la actualidad está muy extendido entre la población.
La estructura del jardín consta de siete parterres que rodean un pequeño estanque central y cuyas aguas son oxigenadas por una noria. Para facilitar el acceso de los visitantes, entre los parterres se han delimitado paseos que permiten la observación directa de las plantas; mientras que la organización de dichos espacios de cultivo es temática, de manera que las especies se han agrupado en función de su empleo como medicinal, culinario o estrictamente aromático.
Díaz Trillo también ha destacado que cada una de las 50 plantas que componen el jardín se acompaña de información sobre sus características y usos a los que se destina, dado que el objetivo fundamental de este espacio es promover la educación y sensibilización ambiental. En este contexto, ha subrayado que la red de Jardines Botánicos y Micológicos de la Junta de Andalucía desarrolla una importante labor formativa en materia de la flora andaluza, y dentro de su programación anual tienen cabida diferentes actividades relacionadas con plantas aromáticas, culinarias y medicinales.
No en vano, por ejemplo, se suele desarrollar un taller sobre plantas aromáticas cada año en todos los jardines de la red en los que los participantes, además de visitar el espacio, son iniciados en el reconocimiento de las especies aromáticas y las propiedades medicinales, la extracción de esencias mediante el uso del alambique y la elaboración de productos como crema labial, colonia, aceites, con especies como lavanda, romero, salvia o pericón, entre otras.
Con estas actividades se completa la función de los jardines integrantes de la red, ya que, además de constituir una pieza clave en la conservación de especies amenazadas, se convierten en transmisores del conocimiento al acercar a la ciudadanía la rica biodiversidad andaluza. El pasado año 2010, se realizaron 247 actividades de educación para la conservación en los jardines de la Red de Jardines Botánicos de Andalucía, que contaron con la participación de más de 42.000 personas.
PROYECTO ECOCAMPUS
Por otro lado, el titular de Medio Ambiente ha señalado que la educación ambiental es precisamente uno de los "pilares" de otra iniciativa fundamental que desarrolla la Junta de Andalucía con las universidades andaluzas --entre ellas la UPO--, el proyecto 'Andalucía Ecocampus'.
Con una duración inicial de tres años (2010-2012), esta iniciativa tiene un presupuesto global de 539.000 euros, cofinanciados entre la Consejería de Medio Ambiente y las universidades. Tal y como ha recordado Díaz Trillo, las líneas de acción principales del proyecto son la difusión de información ambiental; la promoción de la educación ambiental y el fomento del voluntariado ambiental.
Para el curso 2010-2011, se ha previsto la realización de más de cien actividades en el conjunto de las universidades andaluzas asociadas a este proyecto, con una participación estimada de 6.000 personas entre toda la comunidad universitaria.
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