En un comunicado, Faeca señaló que 2008 empezó con una "espectacular" subida de los precios en las materias primas como los cereales y las oleaginosas, de la que "poco o nada" se beneficiaron los agricultores al producirse una vez que la cosecha ya estaba vendida.
Dicho encarecimiento de precios vino acompañado de un significativo incremento en los inputs de producción -carburantes, fertilizantes y fitosanitarios-, con el que se agravaría "muchísimo" la delicada situación en la que se encontraba la ganadería, que ya venía padeciendo una crisis de precios y la caída del consumo.
A todo ello, según explicó, se sumó la subida del coste de los piensos que junto a los problemas derivados de alertas sanitarias como la 'lengua azul' ha colocado al sector ganadero andaluz en un situación "extrema", sobre todo, en el caso del porcino, del ovino-caprino y, en la última parte del año, del sector lechero, con una importante bajada de precios.
En el sector de los grandes cultivos -cereales y oleaginosas-, en los que durante todo el año se ha venido sufriendo un progresivo encarecimiento de sus inputs, se esperaba en la última cosecha de verano levantar cabeza gracias a las buenas expectativas del mercado, algo que "no pudo ser al final debido a una caída en picado de los precios".
En otros cultivos como el algodón y la remolacha, se ha vivido el efecto de la Reforma de su Organización Común del Mercado (OCM) o Régimen de Ayudas, con el descenso de su superficie de cultivo y su producción.
Indicó que tampoco ha resultado ser un buen año para los cítricos, con una reforma que ha dejado en una situación "bastante complicada" a los destinados a transformación, mientras que los frescos también se han visto perjudicados, debido a problemas de calibre. En el caso del sector vitivinícola, el 2008 ha supuesto un año lleno de incertidumbre por su nueva Reforma de OCM.
Por lo que respecta al sector del olivar, en el sector de la aceituna de mesa, ha sido el primer año de su Interprofesional, que será un instrumento cuyos efectos se harán sentir a largo y medio plazo, pues si bien se ha dado un incremento en el volumen del mercado, principalmente de las exportaciones, éste no se ha traducido en una mejora en el precio del producto.
En aceite de oliva, tras unos años de muy buena situación gracias al buen nivel de volumen comercializado y de precios, apuntó que el sector ha caído en una grave crisis y termina el año con unos precios absolutamente hundidos y por debajo del umbral de rentabilidad del cultivo.
Sin embargo, Faeca señaló que sigue convencido de la importancia del sector agrario andaluz y, por ello, confía en que todos estos problemas se resuelvan "no sin grandes esfuerzos por parte del sector productor, que deberá mejorar sus estructuras comerciales, aumentando la dimensión de sus empresas para incrementar su capacidad negociadora ante la gran industria y la distribución y, de ese modo, desarrollando y consolidando proyectos agroindustriales para avanzar en la comercialización, incorporando el beneficio resultante a las rentas de sus socios".
Por último, destacó la necesidad de contar con el apoyo de la Administración para llevar adelante dichos proyectos, y por eso espera que en 2009 se desarrolle de manera efectiva el Plan Estratégico del Cooperativismo Agrario Andaluz.
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