Unas 3.000 personas secundaron el pasado domingo la concentración que, bajo el lema, Por un Puente Genil más seguro, fue convocada por la asociación vecinal Barrio de La Pitilla y el grupo Jóvenes por la Seguridad en el Parque de Espuny, una cita que también contó con la presencia del alcalde, Sergio Velasco, y portavoces de los grupos políticos con representación municipal.
Durante la concentración, los amigos de Andrea, la chica de 24 años que falleció el pasado 3 de noviembre atropellada por un vehículo cuyo conductor se dio a la fuga, portaron pancartas reivindicativas y ramos de flores en recuerdo de la joven, y trasladaron, en nombre de la familia de la víctima, el agradecimiento de estos por las muestras de cariño de la localidad.
El presidente de la asociación vecinal de La Pitilla, Francisco Manuel Amorós, explicó que la concentración venía motivada por el hartazgo de los vecinos. "Estamos cansados de la siniestralidad en el pueblo, del gamberrismo, y lo que necesitamos es más refuerzo de Policía Local y Guardia Civil. Hemos valorado la petición de Policía Nacional, pero el pueblo no reúne los requisitos, de ahí que necesitemos mejor señalización, pasos elevados, cámaras de seguridad en los sitios más conflictivos, etcétera, todo ello con el fin de evitar que se repitan hechos como los vividos estos días".
Amorós señaló que “ahora lo que hacemos es reivindicar lo que no se ha hecho mucho antes. Ya se lo trasladamos al anterior equipo de gobierno, pero pintaron los pasos de peatones y poco más, no se actuó con el corte de la calle donde se encuentran los huertos sociales donde celebran carreras de coches (clandestinas). Trasladamos al equipo de gobierno del PP hace nueve meses las medidas y les presentamos los videos con las carreras, el tráfico en la calle y el enfrentamiento con los vecinos, pero poco se ha hecho". Además, Amorós inicidió en que los actos vandálicos continúan y "el pasado sábado, sin ir más lejos, estuvieron rompiendo espejos de vehículos en una de las calles, tirando naranjas en otras, y lo peor es que cada vez es mayor el índice de delincuencia, siendo los autores niños de 12 y 13 años, con el problema añadido de que son impunes ante la Ley".
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