Griñán compareció ante los medios de comunicación tras la reunión del pleno de la Ejecutiva Regional que estuvo analizando la histórica derrota electoral del PSOE-A frente al PP.
Según su propia definición, la Ejecutiva y los secretarios generales han apostado por la “unidad y por recuperar la confianza a partir de la acción política”.
El dirigente socialista apeló a los “errores” cometidos en Andalucía y en el resto del país, que no precisó, aunque si dejó claro que asume “toda la responsabilidad” de lo que le ha pasado al partido y confesó sentirse “consternado”.
“Es el partido el que tienen que tomar las decisiones en el momento que quiera tomarlas para cómo afrontar las elecciones autonómicas en las mejores condiciones”, sostuvo.
Después de señalar que su cargo está a disposición del partido, tal y “como ocurría anteayer”, el secretario general descartó un posible adelanto de las elecciones autonómicas, previstas para marzo de 2012, e indicó a la pregunta de si es mejor la “bicefalia” entre el partido y la presidencia de la Junta: “Eso no ha funcionado nunca”.
Aclaró, en este sentido, que si el partido se lo propone como parece probable llegado el momento será el candidato socialista a la Junta en los próximos comicios andaluces.
“No tiene ningún sentido adelantar las elecciones cuando hay estabilidad”, esgrimió Griñán, para precisar a continuación que lo que ha puesto de manifiesto estos comicios es una “pérdida de confianza” de los ciudadanos “no del grupo parlamentario”, que cuenta con mayoría absoluta en la Cámara autonómica.
También negó, pese a los resultados, que el primer triunfo del PP en Andalucía suponga un cambio de ciclo en la comunidad al afirmar que una elección “no decide un cambio” y que “una golondrina no hace verano”.
A partir de estos argumentos, el presidente de la Junta no dudó en atribuir los malos resultados a un “voto de castigo” a los candidatos socialistas por la crisis y la destrucción de empleo que se ha registrado en España y Andalucía desde 2008.
“Los candidatos han recibido un voto de castigo de una situación de la que no son responsables”, justificó Griñán, quien situó el principal objetivo del PSOE en recuperar la confianza de los ciudadanos e incidir en la creación de empleo y la recuperación económica.
A su juicio, ahora “no es el momento de movimientos internos” sino de afrontar la crisis y ofrecer resultados y esperanza a los ciudadanos.
Respecto al proceso de primarias que presumiblemente abrirá el próximo sábado el PSOE en su comité federal, Griñán eludió concretar su posición hasta esa cita, pero si aseguró que no es partidario de un congreso extraordinario, petición planteada ayer por la mañana por el alcalde de Dos Hermanas (Sevilla), Francisco
Toscano.
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