El PSOE ha llevado al Parlamento de Andalucía, en la sesión plenaria de este jueves, la situación del comedor del CEIP Valdés Leal de Sevilla, ubicado en la carretera de Carmona, y la "pesadilla" que, en ese sentido, cada día viven los 270 niños que almuerzan en caracolas, "con goteras, sin que funcione el aire acondicionado y sin cumplir con las condiciones mínimas de seguridad".
Un problema que se ha agravado tras la paralización de las obras del nuevo comedor al declararse en quiebra la adjudicataria. "El Gobierno del PP se comprometió a dotar de un comedor digno a este colegio, pero la obra está paralizada de nuevo y no son capaces de explicar a las familias cuál será la solución", ha señalado la parlamentaria socialista Encarnación Martínez.
"Estos padres y madres están aún más preocupados después de que el alcalde de Sevilla les asegurara este miércoles que instalarían nuevas caracolas para albergar el comedor: no lo vamos a consentir", ha manifestado la parlamentaria socialista.
En su intervención, la diputada autonómica del PSOE ha manifestado que "así actúa el Gobierno de la derecha en Andalucía: ofrece caracolas para que coman los hijos de trabajadores mientras riega con contratos millonarios y sin control a las empresas sanitarias privadas", ha criticado Encarnación Martínez.
"Consejera, los niños del Valdés Leal no pueden seguir comiendo en estas condiciones. Si ocurriera alguna desgracia, que Dios no quiera, la única responsable será usted. ¿Cómo es posible que 270 niños de la escuela pública, hijos de trabajadores, estén sin comedor por una cuestión administrativa, y el Gobierno de Moreno Bonilla haya adjudicado 458 millones de euros a dedo, sin publicidad ni concurrencia administrativa, como llevan haciendo con los contratos de la sanidad", ha interpelado la parlamentaria socialista a la consejera de Educación.
Respuesta de Educación
La consejera de Educación, María del Carmen Castillo, ha señalado que el servicio de comedor escolar se está prestando y que fue "una de las primeras actuaciones" que este Gobierno puso en marcha para que pudieran tener el nuevo edificio. En este sentido, ha enumerado las "vicisitudes" que se han producido en ese proceso, desde la adjudicación de los trabajos, pasando por el hecho de que en el año 2020 la propia constructora pidió la resolución del contrato.
"Hubo que actualizar el proyecto con los precios del momento, se licitó por segunda vez la obra, si bien en abril del 2024 la empresa abandonó de manera unilateral la construcción y hubo que firmar la suspensión temporal de la misma, que en ese momento estaba al 21% de ejecución", ha abundado la consejera.
Castillo ha recordado que se ha adjudicado el proyecto de terminación y que, una vez que esté aprobado, solicitarán los trabajos. "Mientras esto ocurre, se han destinado 6.000 euros para garantizar la seguridad de los usuarios del colegio y evitar que se vandalice lo que ya está ejecutado". En cuanto a las caracolas, "no todas son iguales, hay muchas diferencias, porque yo vivo en una provincia donde ha habido durante muchísimos, muchísimos años, muchas prefabricadas".
Movilizaciones de los padres
Las familias del CEIP Vadés Leal han reanudado las movilizaciones para instar a la Junta a que tramite la finalización del nuevo comedor escolar "por vía de emergencia". Desde Educación se había garantizado que estaría lista para el comienzo de este curso, tras más de 17 años de espera. Sin embargo, la obra fue paralizada el pasado mes de abril por la liquidación de la empresa.
En este sentido, las familias siguen insistiendo en el "alto riesgo" para los menores que hacen uso diario de los espacios habilitados para el comedor puesto que "se inundan por completo en episodios de lluvia", sin olvidar el "riesgo eléctrico evidente" que lleva aparejado "al mojarse el cableado de los frigoríficos, microondas y toda la instalación eléctrica de las caracolas".
Casi dos décadas de retraso
La Delegación de Educación comunicó oficialmente al centro la construcción del nuevo edificio en el año 2017. No obstante, no fue hasta 2019 cuando se adjudicó la obra a una empresa constructora. En enero de 2020 se anunció el inicio de las mismas por parte de la Agencia Pública y la empresa comenzó con las mediciones del terreno, pero sólo un mes después, la adjudicataria se declaró en quiebra.
A finales de julio del pasado año se adjudicaron estos trabajos a otra empresa, si bien, el resultado ha sido el mismo, pues seis meses después la obra se paralizó por la liquidación de la constructora, la empresa M2JC Infraestructuras S.L, con un presupuesto de 386.200 euros. Ese hecho motivó a que a finales de mayo más de 200 personas se concentraran a las puertas del centro escolar para denunciar la situación.
La Asociación de Madres y Padres del CEIP Valdés Leal, junto a la plataforma de familias afectadas por el comedor, vienen denunciando el retraso de este proyecto, que llevan esperando más de 17 años. En el año 2012, el Ayuntamiento instaló unas casetas prefabricadas que deberían servir de comedor de forma temporal, durante los dos años que tardaría la construcción del edificio.
Para ello, se instalaron unas caracolas de chapa, con capacidad para 70 personas, que en 2024 aún siguen siendo las únicas instalaciones disponibles para que almuercen a diario más de 270 niños y niñas. Con el paso del tiempo, este espacio está muy deteriorado. Además, debido a la nueva obra, los baños han quedado inutilizados, por lo que los menores tienen que recorrer más de 80 metros para hacer uso de los del edificio del colegio.
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