El Distrito ha activado de forma inmediata el Plan de Prevención de las Agresiones del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que incluye asistencia jurídica y apoyo psicológico a los profesionales afectados.
Esta medida pone a disposición de los trabajadores un plan de prevención con el objetivo prioritario de reducir las posibles agresiones incorporando, además de un protocolo de actuación con asistencia jurídica y apoyo psicológico, una serie de herramientas tales como cursos de formación en manejo de situaciones conflictivas, adaptaciones de locales y ubicación de profesionales y análisis de las incidencias que se producen, entre otros.
Según la delegada provincial de Salud, María Isabel Baena, "cualquier tipo de violencia, tanto física como verbal, dentro o fuera de un centro sanitario es inaceptable". Por ello, desean mostrar su solidaridad y apoyo a los profesionales del Dispositivo de Cuidados Críticos y Urgencias (DCCU) que esta tarde han sufrido, en el ejercicio de su labor, un episodio de agresión física y verbal por parte de un usuario.
El agresor ha sido un usuario que, sin motivo, se ha abalanzado sobre la ambulancia que se desplazaba hacia su domicilio para atender a un familiar que había solicitado asistencia previo aviso. Ante esta situación, los profesionales sanitarios han informado a los cuerpos de seguridad para que se desplazaran hasta el lugar del suceso. Mientras, varios vecinos han intercedido para ayudar a que los profesionales sanitarios pudieran acceder a la vivienda para prestar asistencia al paciente en cuestión. Sin embargo, el agresor pudo zafarse de los vecinos y accedió a la vivienda asestando un puñetazo en el tórax a un enfermero.
Ante este tipo de situaciones, la Consejería de Salud estudia presentarse como acusación particular. Por su parte, este martes tanto la médico como el enfermero del DCCU han presentado la correspondiente denuncia por agresión verbal y física, respectivamente.
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