Comprar a ciegas paquetes que nadie ha reclamado en plataformas como Amazon o Shein es lo que ofrece un mercadillo que estos meses recorre España y en el que se pueden comprar estos productos a 15 euros el kilo.
Organizado por la empresa francesa Destock Colis, que se define en su web como "expertos en liquidación de paquetes perdidos", la particularidad de este negocio que ahora visita Málaga es que venden estos productos en los mismos envoltorios en los que fueron enviados, están precintados y no se pueden abrir para ver qué contienen en su interior.
En Málaga, miles de compradores y curiosos se han acercado hasta el Centro Comercial La Rosaleda para visitar, y por qué no probar suerte, en este peculiar mercadillo, que abrió sus puertas el pasado lunes y hoy se despide de la ciudad.
Móviles, ropa y mucho más
En esta "lotería" de mercadillo, los compradores pueden encontrar todo tipo de productos: ropa, electrónica, tecnología, zapatos, juegos, teléfonos móviles, electrodomésticos, utensilios de cocina, libros y un infinito etcétera.
En el interior de la tienda los artículos están amontonados en grandes cajas contenedoras de cartón en las que no hay ninguna sección ni categoría. Solo se indica que los paquetes se venden al peso y que el precio es de un euro y medio cada cien gramos o de 15 euros el kilo.
Marilyn Edelza, una de las empleadas de la compañía, explica a EFE que en su mayoría los objetos son de alta gama e insiste en que no son paquetes devueltos, sino aquellos que se han perdido y nadie ha reclamado.
Trucos para una buena elección
Según comenta a EFE Ana, una clienta que ha venido con su familia y espera encontrar en iPhone, el "truco" está en buscar un paquete que tenga el tamaño y el peso que podría tener el objeto que buscas.
"Yo no recomiendo coger los que pesan poco y son blandos, porque suele ser ropa", detalla antes de reconocer que abrirá el paquete en su coche por si se lleva "un disgusto" con el producto que ha comprado.
Otro de los trabajadores de la tienda explica que tienen que recordar constantemente que no se pueden abrir los paquetes e indica que sería incapaz de contabilizar cuántas personas han acudido desde que llegaron a Málaga, pero el flujo de gente es continuo.
Detalla que después de Málaga irán a Alicante por un máximo de siete días, ya que el sistema de alquileres de los locales que les ofrece Carrefour para iniciativas como esta es de ese periodo de tiempo.
Fomentar la reutilización
Este proyecto nació de la francesa Christelle Martínez y su marido, quienes abrieron el negocio en una localidad cercana a Béziers (Francia) en enero de 2022 después de que Francia aprobara la ley antidesperdicio.
Después decidieron poner en marcha también una web en la que se pueden comprar lotes al por mayor y, además, decidieron llevar a cabo estos mercadillos que recorren las ciudades de España, Francia y Bélgica.
"Es una forma de dar una segunda vida a los objetos y luchar contra el desperdicio. En estos paquetes encontramos todo lo que se puede enviar a través de Internet", explica en la web Christelle Martínez.
Como detalla, recogen en un centro logístico -que no precisa- los paquetes que nadie ha recogido al cabo de un año y después los revenden en su negocio.
"De esta manera fomentamos las estructuras de la economía local y solidaría y, además, fomentamos la reutilización de los objetos y favorecemos el medio ambiente", concluye.
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