El mercadillo friki solidario volvió a abrir sus puertas este fin de semana. Más de una veintena de puestos roteños, además de otros procedentes de distintas provincias cercanas, ofrecieron productos de todo tipo relativos a esta cultura en crecimiento. Tazas, camisetas, posters, colgantes, pulseras, monederos, elementos artesanales, accesorios de costura, figuras de colección, impresiones 3D y hasta alimentos típicos de Japón, entre muchas otras cosas curiosas, inundaron la Plaza de la Cantera que, en esta ocasión, fue el espacio elegido para acoger este evento tras su celebración en el Bulevar de la Bahía de Cádiz el verano pasado. Una edición que se recuerda como un gran éxito, aunque la idea de querer trasladar el mercadillo a un entorno con mayor afluencia de público lo llevó a situarse esta vez en este céntrico lugar del municipio roteño. Un cambio que llevó a que durante toda la tarde del sábado la Plaza de la Cantera se llenase de personas de todas las edades unidas por la cultura ‘friki’; un lleno absoluto que se acrecentó a medida que avanzó la tarde y decayó, como consecuencia celebrada, el calor acuciante que acompañó a toda la jornada del sábado.
Los más pequeños se mostraron más interesados por series anime en tendencia como ‘One Piece’, mientras que la nostalgia se apoderó de los mayores con otros clásicos de siempre como ‘Dragon Ball’. Todos estuvieron unidos por un mismo sentimiento de pertenencia a lo que casi que podría considerarse un estilo de vida, pero sobre por la solidaridad. Entre la multitud de asistentes al mercadillo, captó la atención un tipo simpático de constitución rolliza, barba poblada y cabeza afeitada, vestido con una llamativa camiseta hawaiana de color naranja. Se llama Julián, aunque todos le conocen como ‘Roshi solidario’ por su impresionante parecido físico con el maestro de Goku, en la serie ‘Dragon Ball’. Tanto es así, que parecía sacado de la misma serie, aunque Julián es malagueño de nacimiento. Venía en representación de ‘Eventos Go’, una pequeña empresa dedicada a la realización de eventos relacionados con el mundo del manga, videojuegos y la cultura alternativa, con una intención especial. “Recaudamos para la infancia solidaria. Ayudamos a los chavales de países en vía de desarrollo con los gastos médicos, farmacéuticos y con familias de acogida”, expresaba este maestro de las artes sociales que, además, nos enseña a ser solidarios. Porque con un pequeño gesto se puede crear una gran diferencia.
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