La noticia de que finalmente los Fondos Next Generation proporcionarán a Párkinson Bahía de Cádiz los 1,5 millones que necesita para culminar la segunda fase de la nueva Residencia Día, ha supuesto para la entidad poco menos que le hubiese tocado el Gordo de la Navidad. Eso sí, nadie les ha regalado nada y la tramitación de la ayuda por parte del equipo directivo de la asociación ha sido inmaculada.
La directora general, Lola Garzón, no escondía la “enorme satisfacción” que ha supuesto para la familia que forma Párkinson Bahía de Cádiz el lograr dicha subvención que llegará de Europa. “Esto supone un salto cualitativo a nuestro proyecto y a nuestro objetivo. Conocéis de primera mano todo lo que ha conllevado llegar hasta donde hemos llegado, no ha sido un camino fácil pero lo hemos logrado. Yo repito muchas que hace falta constancia, perseverancia y dosis de paciencia, no hay más”.
Garzón afirma que ese dinero es el que falta para poder finiquitar la obra de “ese centro tan necesario” que les permitirá ofrecer “un servicio de mayor calidad” y, además, “poder llegar a más gente”. De esta manera, podrán dar salida a la demanda real que tiene actualmente la entidad y que le llega desde todos los puntos de la provincia.
A la obra le quedan por delante diez meses de ejecución, según el calendario diseñado por el director de la misma. La intención es retomar los trabajos en el mes de septiembre, si bien en agosto se harán trabajos menores de replanteamiento de alguna de las actuaciones previstas.
“Siempre ponemos un par de meses más por aquellos inconvenientes que puedan aparecer, que es habitual cuando se hace una obra”, apunta la directora general, quien añade que “si todo marcha bien para julio o agosto estarán finalizadas. Luego habrá que equipar el centro y la idea es inaugurarlo en el 2025. Y nosotros si nos marcamos un objetivo, lo conseguimos”.
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