Eso sí, la edil en declaraciones a los medios reconocía que esta cuantía supone el 60% de la cantidad total que le corresponde a la localidad por este concepto en el que tiene mucho que ver la población censada. Un porcentaje que teniendo en cuenta el mes en el que nos encontramos supone agotar las posibilidades con demasiada premura; pero a dos meses de las elecciones y de un más que probable cambio en la configuración gubernamental de Estepona "qué más dá, que el que venga detrás que arree", pensará seguro más de uno. Sobre todo si a este anticipo le sumamos el obtenido a finales del pasado año y que superaba los dos millones de euros; éste proveniente de los Impuestos del Estado (PIE).
Estirar el chicle. Una frase utilizada en más de una ocasión por la máxima responsable de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Estepona y que hoy más que nunca viene al caso teniendo en cuenta las maniobras que a tan sólo tres meses del inicio de este nuevo ejercicio, se están llevando a cabo para pagar los más de tres millones de euros a los que tiene que hacer frente el Ayuntamiento de Estepona cada mes para pagar las nóminas de sus empleados.
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