Preguntado por si conoce si algunos ingresos en efectivo de las sociedades se nutren de pagos a Roca por parte de empresarios con intereses urbanísticos en Marbella, el abogado Manuel Sánchez Zubizarreta ha reiterado que “si yo hubiera sabido, conocido o intuido cualquier tipo de ilegalidad en una conducta del señor Roca habría dejado ese mismo día de ser abogado suyo, cómo voy a conocer que eso sean dádivas, porque, además, es que no lo son”.
En la sesión de este martes del juicio del caso Malaya, el acusado contestó a las preguntas del fiscal, el cual ha ido desgranando, sociedad por sociedad, los ingresos en efectivo y las transferencias realizadas, con el fin de conocer el origen de los fondos utilizados para las operaciones. Así, Sánchez Zubizarreta ha reiterado que estas empresas se financiaban “a través de préstamos entre sociedades, hipotecas, créditos bancarios o leasing”.
En este sentido, ha apuntado que Roca “no ha dado ni una sola peseta para las sociedades, se ha limitado a pagar la compra de las sociedades, es lo único” y ha precisado que “todo el dinero proviene de compraventas otorgadas ante notario en escritura pública, con acceso al registro, y todas con la escrupulosidad más exacta y sujeción a las normas legales”.
“Todo procede de compraventas, préstamos entre sociedades y créditos externos”, ha insistido, al tiempo que ha señalado que todas estas empresas “han tenido una actividad y todas han generado dinero, beneficios”. Ha rechazado que se denomine a este grupo de empresas como entramado o red, algo que es “otro invento”; y ha repetido que se actuaba siguiendo “siempre la voluntad de don Juan Antonio Roca, que veo que desde luego sabe mucho más de sociedades que muchas personas”.
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