El entrenador del Córdoba, Iván Ania, ha analizado este viernes el que será el partido más decisivo de la temporada, la vuelta de la final del playoff de ascenso a LaLiga Hypermotion, en el que su equipo se enfrenta al Barcelona Atlètic tras el 1-1 de la ida y en el que el empate daría el ascenso a los cordobeses, subcampeones de grupo en la liga regular.
De cara al choque del domingo (21.00 horas), el técnico señala que motivar a sus jugadores es algo que “no hace falta para nada. Todo lo contrario, a veces hay que bajar la activación. No puedes pasarte por abajo ni por arriba en cuanto a la motivación. Debemos transmitir normalidad y, a la hora del partido, morir por ascender”.
Ania cree que “nosotros nos jugamos más que ellos por una sencilla razón: para la mayoría de ellos, su futuro no depende de este partido. A nosotros nos cambia la vida. Para muchos de los nuestros sería la primera vez que alcanzan el fútbol profesional. Es un cambio deportivo, profesional, económico y familiar. A mí me cambia la vida familiar, podré ver a mis hijos más de tres veces al año. Ojalá dentro de unos años se hable de los dos ascensos de los que se viene hablando y de este de 2024”.
Sobre el planteamiento del partido, sostiene que “tengo una idea muy parecida a la de la ida, pero hemos matizado cosas. Hemos visto muchos partidos del rival. La calve, para mí, es el balón. En los primeros 25 minutos el partido la posesión estuvo más igualada, creamos peligro e hicimos el gol. Cuando ellos se apoderaron del balón nos hicieron sufrir. Sé por qué lo tuvieron más, aunque no lo voy a decir aquí, y eso es lo que vamos a intentar arreglar”.
“Después del esfuerzo que hicimos en liga, tener que jugar un mes más, aunque todos los estábamos deseando, pero te genera un desgaste importante físico y mental. Apenas estamos entrenando, porque necesitamos que los jugadores lleguen frescos. Ahora ya no vas a coger un punto de forma ni lo vas a perder. Todos están bien físicamente”, comenta el preparador.
Sobre la afición, espera que tenga “el mismo papel que el día del Málaga y contra la Ponferradina, que nos ayudaron en los momentos en los que estuvimos mal. Eso nos dio alas y es lo que espero también en este partido. El público va a ser un jugador más”.
Aunque el empate le vale al Córdoba, el entrenador lo tiene claro: “Yo voy a salir a ganar. Si sales a empatar, aunque te sirva, estoy seguro de que no lo vas a conseguir. Sería, además, transmitir un mensaje equivocado al equipo, y más contra un equipo al que necesitamos quitarle el balón y no meternos atrás. Está claro que por haber terminado segundos tenemos ese privilegio, que el empate nos vale, pero no pensamos en ello”.
“Hay que estar preparados para saber que un golpe en contra no es definitivo, pero tampoco lo es un golpe a favor. Los partidos se deciden por momentos, por detalles que son definitivos. Hay que tener máxima concentración”, indica.
Leiva, sancionado, es la única baja en los blanquiverdes. Todos los demás están disponibles. El técnico ha alabado el comportamiento de su equipo durante toda la temporada, sin apenas incidencias en el vestuario. Igualmente, admite que la situación le recuerda a la del ascenso que logró al frente del Racing de Santander.
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