Ni las lluvias ni las altas temperaturas pueden con ellos. Los profesionales sanitarios del Área de Jerez, Costa Noroeste y Sierra han vuelto a decir basta. No piensan quedarse de brazos cruzados “hasta que se nos escuche” y este miércoles han protagonizado una sentada a las puertas del edificio de Dirección-Administración del Área para protestar por los recortes en la contratación que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) consumó el pasado 31 de mayo.
La ubicación de la protesta no ha sido al azar. Los sindicatos Satse, UGT, CSIF, SAE y TCCEL han convocado a los sanitarios en el umbral de las instalaciones donde se encuentran los despachos de la gerencia y el resto de directivos, con la intención, además, de llevar sus acciones a su interior. "Menos directores, y más trabajadores"; "menos reuniones y más contrataciones", gritaban al unísono. “No nos han dejado y esta vez han enviado a la Policía Nacional”, explicaba un representante sindical.
Pese a todo, han continuado con la movilización, a la que se han llegado a sumar algunos usuarios, mientras otros les mostraban su apoyo a su paso. “Muy bien, muy bien que hacéis”; “Por estas cosas son por las que nos tenemos que manifestar”, decía otra señora. Eso sí, los sanitarios han vuelto a hacer un llamamiento a la ciudadanía para que se sume a estas acciones, al tratarse de un conflicto que va más allá de lo laboral. “Usuario no nos mires, únete”, llegaban a decir en la sentada para llamar su atención. De hecho, han alertado por activa y por pasiva de que la calidad asistencial se está viendo afectada por el déficit de personal.
“Estamos de nuevo pidiendo personal, los recortes nos han afectado de lleno, las bajas y los días de asuntos propios están sin cubrir, hay problemas para las vacaciones; julio ya de por sí es una época mala, pero se prevé que sea muy complicado, y a eso hay que unir el malestar que hay en el Hospital”, señala Patricia Marín, delegada de UGT del Hospital de Jerez.
Aunque todas las categorías profesionales “están muy afectadas”, Marín se detiene especialmente en “las más bajas”, como son las de los auxiliares de enfermería, auxiliares administrativos o celadores. “Tienen más carga física, son personas mayores y al estar bajo mínimos se van resistiendo y se tienen que dar de baja”. De igual manera, pone el foco en los laboratorios de microbiología y a Medicina Interna, como las unidades que se han visto más afectados por los recortes.
Hasta ahora no les han facilitado datos concretos, salvando el caso de Enfermería, que ha cifrado los recortes en un 40% de personal menos, pero tienen claro que el porcentaje de contratos de profesionales eventuales que no ha sido renovado “tiene que ser muy alto”.
Según asegura esta delegada sindical, basta con ir a las plantas para comprobar las “malas condiciones” en las que los compañeros están trabajando. “Los turnos de 12 horas son a destajo, desde las ocho de la mañana hasta las ocho de la tarde. Ayer (por el martes) en Medicina Interna faltaba un auxiliar de enfermería, pero ni hay personal ni se llama por bolsa con lo que si te quedas sin compañero, tienes que sacar el doble de trabajo y asumes el trabajo del compañero que falta”, critica.
La falta de información del Plan de Vacaciones a las puertas del verano tampoco les ayuda. “Hoy han llamado a tres celadores conductores del Plan de Vacaciones. Va todo con mucha lentitud y con mucha falta de previsión”.Ante este panorama nada alentador tienen claro que “vamos a seguir movilizándonos hasta que se nos escuche y se refuerce la plantilla”, apunta, con pocas esperanzas a que la reunión de este jueves de los sindicatos con la consejera de Salud dé un giro a la situación.
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