Según ha informado la Subdelegación en una nota, la propietaria de la vivienda sospechó de ella desde que entró a trabajar en el inmueble hace dos meses.
De este modo, había notado la falta de una cartera con 300 euros y después, las joyas, seis juegos de pendientes de oro con distintos adornos, seis sortijas igualmente de oro, varios colgantes y una pulsera de oro.
Ante esto, los policías dedicados a la investigación de este tipo de delitos, llegaron a averiguar donde se encontraban gran parte de las joyas sustraídas, que pudieron ser entregadas a su propietaria, procediendo a la detención de la empleada.
Así, la detenida reconoció su autoría y se comprometió a devolver el resto de las joyas que aún conservaba en su poder. El atestado instruido ha sido remitido a la autoridad judicial, mientras que la detenida ha quedado en libertad con cargos.
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