Dos agentes de policía resultaron heridos graves al ser atacados por un oso mientras buscaban a una persona desaparecida en un bosque en Akita (norte de Japón), en un nuevo incidente protagonizado por estos animales en el país.
Los dos agentes participaban el pasado sábado en las operaciones de búsqueda de un hombre de 64 años en una zona boscosa de la ciudad de Kazuno, a quien encontraron muerto.
Cuando trataban de transportar el cuerpo sin vida del desaparecido, los policías fueron atacados por el oso, recibieron heridas de gravedad en la cabeza y en los brazos y huyeron de la zona, según informaron las autoridades locales de Kazuno.
La policía ha cerrado las carreteras y caminos que pasan por las inmediaciones de la zona donde tuvo lugar el incidente, y alertado a los residentes de las áreas urbanas más cercanas del riesgo de que se produzcan más ataques.
Las autoridades reanudaron este domingo la búsqueda del cuerpo del fallecido -se desconoce por el momento si su muerte está relacionada con el oso-, quien permanecía desaparecido desde el pasado día 15, y han convocado también una reunión de emergencia para dar respuesta a la situación.
Japón viene registrando un incremento de los ataques de osos a humanos, de los que constan 198 casos y seis víctimas mortales durante el año fiscal comprendido entre abril de 2023 y el pasado marzo.
Se trata de las mayores cifras registradas desde que las autoridades comenzaron a compilar estos datos en 2006, un incremento que se atribuye a la escasez temporal de nueces y bellotas, principales alimentos para estos animales, lo que empuja a estos granes mamíferos a abarcar áreas fuera de bosques o montañas.
A finales del mes pasado se produjo otro incidente en Hokkaido (norte de Japón), cuando un oso atacó una camioneta al atravesar un bosque, un incidente que fue grabado por uno de los ocupantes del vehículo y luego difundido por las autoridades locales para concienciar sobre el riesgo de estos incidentes.
Los dos ocupantes salieron ilesos tras lograr reanudar la marcha del vehículo, que quedó con daños visibles en su carrocería y luna frontal.
Ante el incremento de estos sucesos, las autoridades niponas han tomado otras medidas como aumentar las subvenciones para cazadores de osos u organizar seminarios para entrenar a la ciudadanía en el uso de trampas y armas contra estos grandes mamíferos.
Los osos autóctonos del archipiélago japonés son el “Ursus thibetanus japonicus”, una subespecie del oso asiático considerada vulnerable o con alta probabilidad de quedar en peligro de extinción, y los osos pardos del Ussuri (“Ursus arctos lasiotus”), que habitan exclusivamente en la isla septentrional de Hokkaido.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es