El entrenador del Cádiz, el argentino Mauricio Pellegrino, ha declarado este viernes, antes del partido que disputarán el domingo en el estadio Nuevo Mirandilla ante el Getafe, en el que el conjunto local apura sus opciones para mantener la categoría, que juegan “una final” por las escasas posibilidades de permanencia que tendrán si no vencen.
El técnico del conjunto gaditano, en la comparecencia de prensa que ofreció tras la sesión preparatoria, indicó que “todos deben tirar para el mismo lado”, en alusión al llamamiento del club para que la afición anime a su equipo y también por el enfado mostrado por colectivos de seguidores con la gestión de los dirigentes.
Pellegrino manifestó que en el encuentro hay que dejar claro que “se note la diferencia de necesidad” del Cádiz, en busca de la permanencia, ante el un adversario, como el Getafe, situado tranquilamente en el décimo puesto de la tabla.
El preparador argentino señaló que existe una “obligación moral y profesional porque ya no hay tiempo” para esperar a más partidos a reconducir la situación, que ya el Cádiz está seis puntos del Mallorca, rival que marca los puestos de permanencia.
Pellegrino sostuvo que el Getafe es un rival “muy complejo” y que sus futbolistas "son buenos en el juego directo" y con “gente de velocidad e intensidad” en el centro del campo, además de ser “siempre un equipo incómodo”.
El entrenador sudamericano insistió en que ante ese tipo de adversario, y también por las necesidades en la clasificación que tiene el Cádiz, necesitan ser "inteligentes y competitivos".
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