Según han precisado a Efe fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Huelva, dicho dispositivo se activará en los días precios al juicio y el mismo tendrá carácter de contravigilancia.
Los 60 efectivos estarán en Huelva durante el desarrollo de la vista oral, que se prevé se prolongue durante unos quince días en sesiones, normalmente, de mañana y tarde; además el acceso a la Audiencia Provincial será restringido y un cordón de seguridad rodeará el edificio para garantizar la seguridad de las personas.
Forman parte de la Brigada de seguridad Ciudadana del Cuerpo Nacional de Policía de Huelva reforzada con indicativos de la Jefatura Superior de Andalucía Occidental.
Por otra parte, se está a la espera de que esta misma semana lleguen a la Prisión Provincial de Huelva, procedentes de la de Albolote (Granada) los dos acusados del presunto asesinato, los hermanos Santiago y Rosa del Valle.
Según adelantó esta semana el director de la prisión, Francisco Sanz, una vez lleguen permanecerán “aislados” previsiblemente en el ala de enfermería, donde estuvieron la última vez que vinieron a Huelva, en una zona que consta de una pequeña galería con cuatro celdas en la que normalmente se encuentran presos enfermos con problemas de aislamiento, y en la que desde hace tiempo no hay nadie.
Sanz destacaba que lo “fundamental” es evitar que los acusados tengan relación alguna con el resto de reclusos, para que “no tengan ninguna dificultad ni problemas con ellos” y esa zona es “bastante segura y controlada”.
Sobre los días del juicio, dijo que seguramente la Policía Nacional trasladará a los acusados a la Audiencia, estableciéndose un dispositivo especial para evitar “complicaciones e incidencias” en los traslados diarios que “nunca se harán ni a la misma hora ni por el mismo recorrido”.
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