Hasta tres ovejas muertas han aparecido flotando en el río Guadalete, descuartizadas, con las vísceras metidas en bolsas y rodeadas de unas curiosas y bien hechas coronas de flores. Todo ello apunta a un extraño ritual que se habría repetido en abril de 2021 en la localidad sevillana de Cantillana, donde igualmente aparecieron corderos muertos en las mismas circunstancias, aunque en este caso incluso rodeados de velas. Más recientemente, el periódico ‘El Norte de Castilla’ publicaba el pasado 26 de abril un suceso casi calcado que tuvo lugar en la localidad de Tordesillas, igualmente en su río.
Estos hechos han sido puestos en conocimiento de la Delegación municipal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Arcos, que su vez ha trasladado el macabro suceso al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil para la posible apertura de una investigación.
La voz de alarma fue dada por un vecino del Barrio Bajo que, tras un paseo por las riberas del río, se percató de la dantesca imagen junto a la pasarela localizada en el molino de San Antón, en la zona conocida como el azud de La Molina. El vecino comunicó la aparición de los cadáveres también a la asociación medioambiental AMA Natura-Ecologistas en Acción, que espera igualmente que este suceso se pueda esclarecer por el delito que supondría la muerte de los corderos y el depósito de los restos en el cauce del Guadalete con el consiguiente daño especialmente para la fauna del río.
El aparentemente sacrificio de animales ha dejado perplejo al delegado de Medio Ambiente de Arcos, Leopoldo Pérez, que no da crédito al hallazgo en una zona de frecuente paseo de senderistas que recorren las riberas del Guadalete.
De momento no ha trascendido una posible denuncia por robo de ovejas que pusiera inicialmente en alerta a los cuerpos de seguridad. Todo apunta a que se trata de una acción cometida por más de una persona.
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