Raquel Rodríguez espera desde hoy la sentencia del juicio al que se enfrenta por injurias contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado durante el desarrollo de la huelga del metal de Cádiz.
La mujer, residente en el Río San Pedro, fue protagonista en aquellos días por plantar cara a la tanqueta que irrumpió en el barrio para disolver las manifestaciones. Pero, además, se vio envuelta en otro episodio posteriormente, cuando actuó en defensa de Vicente, un vecino, durante la manifestación convocada por el Sindicato de Estudiantes en la capital gaditana el 23 de noviembre de 2021, en un enfrentamiento con la Policía Nacional.
Raquel compartió, después del incidente, una captura de pantalla en su cuenta personal de Facebook en la que aparecía un agente, a quien identificaba como responsable de la actuación en la que se vio envuelta.
A su salida del Juzgado de lo Penal número 1, esta mañana, explica que el funcionario que aparecía en la imagen se puso en contacto para asegurarle que no había intervenido, “y borré la publicación”.
Sin embargo, no se ha librado de la acusación, que le acarrearía en el peor de los casos, doce meses de multa y una indemnización de 300 euros.
“Querían un caso ejemplarizante para que el movimiento obrero no se vuelva a levantar, han tenido fijación en mí por las declaraciones por la tanqueta en los medios, no hay una sola huelga con un cabeza de turco y me ha tocado a mí”, lamenta.
Su abogado, Antonio Moreno, explica, por su parte, que, en ningún caso, Raquel quiso señalar a ningún agente en concreto y solo puso de manifiesto “la desproporcionada actuación policial” durante la huelga del metal, “con porras, bolas, gases lacrimógenos y la citada tanqueta”.
Por ello, se muestra optimista ante una sentencia que se espera para dentro de dos o tres semanas.
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