l último episodio de precipitaciones de la borrasca Nelson ha traído, inesperadamente, un nuevo recurso turístico a las sierras de Jaén, cuya riqueza paisajística se ha ampliado con la recuperación de numerosas cascadas y saltos de agua.
Jabalcuz y el paraje del Ojo del Buey, en la Fuente de la Peña, son dos ejemplos de la nueva estampa que dejan las últimas lluvias en las inmediaciones de la capital jiennense, donde solo en Semana Santa se superaron los 200 litros por metro cuadrado.
“Hacía al menos 10 años que no se veía así el arroyo de los Baños”, comentaba a EFE Francisco González, un excursionista jubilado, mientras observa cómo el agua cae entre cascadas.
Jabalcuz, a escasos cinco kilómetros de la capital jiennense, es un entorno paradisíaco con unas aguas termales de finales del siglo XVII. En 1846 sus aguas fueron declaradas de utilidad pública y declaradas Bien de Interés Cultural junto a los jardines en 2009, pero el balneario lleva más de cuatro décadas cerrado y el paraje se encuentra abandonado desde entonces.
En el año 2008 la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Jaén y Caja Granada firmaron un convenio para que el conjunto volviera al patrimonio de la ciudad. La Junta pagó un millón de euros para recuperar este lugar emblemático y llegó a ceder al Ayuntamiento el conjunto termal por un plazo de 50 años, para que se rehabilitara y se pusiera en uso como balneario.
Pero la realidad es que el balneario sigue abandonado y escenario de actos vandálicos ocasionalmente. La recuperación de Jabalcuz forma parte del acuerdo de gobierno que PP y Jaén Merece Más firmaron a principios de este mandato para gobernar la capital.
Muy cerca de Jabalcuz, en el paraje de la Fuente de la Peña, el nacimiento del Ojo del Buey ha vuelto a brotar muchos años después dejando un escenario de gran belleza paisajística para los muchos visitantes que se acercan a diario a visitarlo.
Se trata de un nacimiento que brota cuando el nivel freático lo permite, pero que los vecinos llevaban al menos 10 años sin poder contemplar semejante espectáculo. El nombre del Ojo del Buey tiene que ver con la inmensa mole de piedra que es el Cerro de la Fuente de la Peña, que se asemeja a la cabeza de un toro o buey.
Existe una leyenda popular jiennense que indica que existía un tesoro en frente del Ojo de Buey, muchos buscaron el tesoro cavando en los alrededores y hubo una persona que encontró el tesoro buscando encima de la fuente, justo en la frente del Ojo de Buey.
La otra cara de la moneda que han traído las últimas lluvias se encuentra el sendero del paraje de Los Cañones, que ha tenido que ser precintado por la crecida del río Eliche.
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) se va a ver ahora obligada a reparar este sendero de casi un kilómetro de longitud, que apenas llevaba dos meses construido.
Mientras tanto, el PSOE ha apremiado al equipo de gobierno de Jaén, compuesto por PP y Jaén Merece Más, a ejecutar un crédito para ejecutar la segunda fase de la adecuación de este paraje singular cercano a la capital.
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