La portavoz del Partido Popular de Málaga, Elisa Pérez de Siles lo ha dejado meridianamente claro: “El PP de Málaga no necesita pacto alguno, ni foto alguna, para seguir trabajando, preocupándonos y ocupándonos por uno de los asuntos más importantes y estratégicos para nosotros, la vivienda”.
Es la respuesta en una semana cargada de propuestas y contrapropuestas en torno a la promoción de vivienda pública después de que el portavoz socialista en el ayuntamiento de la capital y secretario provincial del PSOE de Málaga, Daniel Pérez, tendiera la mano al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, para “construir mediante el diálogo y la acción una alianza por la vivienda en nuestra ciudad”, donde "hay miles de personas que tienen que elegir entre llenar la nevera o pagar el alquiler, caso de las personas mayores".
A juicio de Pérez "Málaga tiene un gran problema de habitabilidad, es la segunda capital española en que más se ha incrementado el precio del arrendamiento y encontrar una vivienda digna por menos de 900 euros es misión imposible", y en el último trimestre de 2023 "el alquiler ha subido más de un 19%".
Por eso, el dirigente socialista ha insistido en pedir al alcalde "que reconozca la realidad, que Málaga tiene un severo problema de vivienda, que cada año más jóvenes se van y que las personas mayores, con pensiones que rondan los 1.000 euros, tienen que elegir entre comprar fruta y verdura o pagar la casa si no la tienen en propiedad".
Muy lejos, la postura del PP ya que, para Pérez de Siles, "con el PP puede hablar de vivienda cuando quiera, pero para alianzas o performance vacías de contenido que no cuente con nosotros, postureo ninguno". Y puso sobre la mesa que el Ayuntamiento de Málaga tiene más de 530 viviendas en construcción y otras 500 "en distintos trámites administrativos".
Pérez de Siles ha recordado que el secretario general del PSOE de Málaga, Daniel Pérez, centró su campaña a la Alcaldía de Málaga en una promesa: construir 10.000 VPO a un precio de 150.000 euros, avaladas con la visita de varios ministros; “cuando todos sabíamos que era humo; algo que refrendaron los malagueños el 28 de mayo, dando la mayoría absoluta a Paco de la Torre”.
Frente a ello ha situado la apuesta del Ayuntamiento de Málaga, con 40 millones en el presupuesto de 2024 para promoción de vivienda protegida y el desarrollo del Plan Municipal de Vivienda y Suelo, “una hoja de ruta clara que se está cumpliendo”. Precisamente, a finales de 2023, el Consistorio cedió gratuitamente 13 parcelas para que privados construyan 1.168 nuevas viviendas protegidas que serán adjudicadas en régimen de propiedad, a través del registro municipal de demandantes.
Además, ha puesto al presidente del Gobierno también en el centro de la polémica al contraponer las iniciativas municipales “con las decenas de anuncios de construcción de vivienda por parte de Pedro Sánchez y que nunca ha materializado”. “Durante sus cinco años de mandato, las ha anunciado de todas las maneras, pero la consecuencia siempre ha sido la misma: cero viviendas a disposición de los ciudadanos”, ha afeado. En este punto, ha recordado el anuncio de 2018 para promover 20.000 viviendas para alquiler social; los sucesivos para movilizar viviendas de la Sareb y de la banca, la construcción de 100.000 viviendas de las cuales un tercio irán para alquiler para jóvenes, las 20.000 viviendas nuevas en terrenos del Ministerio de Defensa, etcétera.
La “ocurrencia” de las viviendas prefabricadas
Y llegó un tercero en discordia, ya que la confluencia de izquierda en el ayuntamiento de la capital, Con Málaga, ha pedido "medidas para favorecer la emancipación de los jóvenes y frenar el aumento de infravivienda".
Su portavoz, Toni Morillas también ha dirigido sus reclamaciones al alcalde, Francisco de la Torre, al que pidió que "se deje de ocurrencias como la instalación de casetones prefabricadas portátiles y ponga en marcha medidas para moderar los precios de los alquileres, favorecer la emancipación de la población joven malagueña y frenar el aumento de las situaciones de infraviviendas en Málaga".
Morillas alude al último informe del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud que "pone de manifiesto que sólo el 13% de los jóvenes andaluces de entre 16 y 30 años consigue emanciparse, la segunda tasa de emancipación más baja del país”.
Morillas criticó al Ayuntamiento que esté "volcado en favorecer rascacielos a precios millonarios construidos por fondos de inversión y que es permisivo ante las viviendas turísticas fuera de regulación, pero que desatiende la auténtica emergencia para el acceso a la vivienda que viven miles de jóvenes y familias en la ciudad".
Así califica como "ocurrencia" la especulación con la posibilidad de implantar casetones portátiles lanzada por la delegada de Urbanismo, Carmen Casero, "una propuesta que dista mucho de las 8.900 VPO prometidas por el alcalde en campaña". Al respecto señala que se trata de viviendas portátiles de reducidas dimensiones que no garantizan unas condiciones de vida adecuadas ni estables para sus moradores.
"Lo que Málaga necesita es más suelo y más fondos públicos para la construcción de vivienda protegida y programas de alquiler social. Así como un gobierno valiente para intervenir en el mercado del alquiler, defendiendo la declaración de Málaga como zona tensionada conforme a la ley estatal de la vivienda y poniendo en marcha un programa de inspección e viviendas turísticas fuera de regulación", propone Morillas.
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