Concha Velasco ha hablado con los medios en el hotel donde se ha estado alojando en Málaga, ciudad donde se encuentra ingresado Paco Marsó desde el pasado viernes cuando sufrió un derrame cerebral mientras celebraba el cumpleaños de su nieto.
"El recuerdo que me queda es el del hombre al que amé tanto", dijo. "Mis hijos me han pedido que tome las decisiones necesarias porque a ellos les toca ahora llorar. A mí ya me tocará en privado", explicó Concha a la salida del hotel.
"No nos importaba que se quedara en una silla de ruedas, pero nos han dicho que ni eso", decía la actriz que, en todo momento, habló en pasado de su ex marido. "Mis hijos están absolutamente destrozados porque se va a morir su padre".
"Paco era muy buen padre con sus hijos. Ellos le adoran (...) Tengo un recuerdo maravilloso de Paco porque era muy buena persona, muy generoso, valía muchísimo", declaró sobre el productor de teatro.
NO HAY SOLUCIÓN
Después la artista se dirigió al Hospital Carlos Haya donde se encuentra ingresado Paco Marsó desde el pasado viernes, tal vez para despedirse de él. Allí Concha explicó el por qué del empeoramiento de su ex marido: "Tuvo un segundo derrame y ese segundo derrame le ha invadido el cerebro" y añadía: "Anoche nos dijeron que no había solución".
La última hora del estado de salud del productor teatral apunta a "un coma irreversible". Cuando Concha Velasco regresó a Madrid, los periodistas que la esperaban en la estación del AVE le preguntaron acerca de los rumores que dicen que tal vez la familia tenga que tomar una drástica decisión ante la vida de Paco Marsó.
La actriz sentenció que "no hay que tomar ninguna decisión. La decisión la toma Dios y durará el tiempo que tenga que durar. Está muy bien atendido, muy bien cuidado". La que fuese la chica yeyé mostró su lado más sensible al hablar del hombre con el que compartió buena parte de su vida.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es