La Parroquia de San Francisco y la Asociación de Belenistas La Adoración de Arcos se han aliado para mostrar uno de los trabajos más bellos que se exponen en la ciudad en estas fiestas navideñas. El altar del templo luce un nacimiento artístico que feligreses y público en general podrán contemplar hasta enero próximo como una exaltación a la celebración cristiana de la Navidad, pero también una ocasión para recrearse en el esmerado trabajo realizado en la propia sede de la asociación dirigida por Carmelita Temblador y que posteriormente fue cuidadosa y meticulosamente trasladado; una operación para trabajar el montaje cómodamente y no alterar la vida de la propia parroquia.
La inauguración gozó de la bendición del párroco Iván Carrera ante la emocionada presencia de los propios belenistas. Dos días antes, el sacerdote hizo entrega de un detalle a Rafael Castro y Santiago Galván por su trabajo en este belén artístico junto a cuatro mujeres de la asociación. El acto se vio enriquecido por los villancicos interpretados por la cantaora Lourdes Soto acompañada a la guitarra por su esposo, Antonio Iglesias.
La presidenta de La Adoración narró al público cómo el párroco le pidió expresamente un belén para la iglesia al objeto de conmemorar el primer pesebre creado por San Francisco de Asís hace 800 años. El belenista Santiago Galván dijo en el acto que el maestro desaparecido Antonio Bernal fue una persona importante en su vida porque le abrió el camino al belenismo como arte. Tras reconocer esa “pesada losada” del encargo, asumió con alegría la petición del párroco para realizar el belén junto a Rafael Castro “codo a codo”. Se mostró muy reconfortado finalmente con la tarea, que le ha servido para intimar con Rafael Castro, surgiendo así una amistad recíproca. Igualmente, tuvo palabras para la compañera Marina, joven de la hermandad de San Antonio cuya enfermedad los ha mantenido en vilo. Por su parte, Rafael Castro explicó que, tras la pandemia, La Adoración retomaba su actividad, que pasaba por el montaje de ese belén propuesto por la parroquia para lucirlo en su altar mayor. Tras vencer la inicial dificultad de carecer de figuras y la presión de los plazos, se logró el reto de montar un belén con imágenes de grandes proporciones a los que no estaba acostumbrada la asociación de belenistas. Asimismo, tuvo palabras de recuerdo para la recientemente fallecida trabajadora de la Delegación de Cultura, Manoli Fernández, y para otras personas y empresarios que han colaborado en la labor, entre ellos su nieto Manuel. Rafael Castro terminó devolviéndole a Santiago Galván las muestras de amistad y deseando a los presentes feliz Navidad.
El párroco cerró definitivamente el acto para reconocer “la obra de arte” de La Adoración y evocar los sentimientos de “unidad, comunión, convivencia y estar cerca de Dios desde la sencillez de un niño”. Tras la bendición del magno nacimiento y, de nuevo, los villancicos de Lourdes Soto y Antonio Iglesias, terminó la entrañable velada que daría paso a la conferencia pronunciada por el abogado y presidente del Consejo parroquial de San Francisco, Miguel Salas, sobre el considerado primer belén de la historia, obra, precisamente, de San Francisco de Asís.
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