La ejecución del proyecto del futuro parque periurbano de La Canaleja no termina de arrancar a pesar de que el Gobierno local dio por comenzados los trabajos el pasado 7 de agosto con el acta del inicio de las obras. Justo un mes antes, el 7 de julio, la alcaldesa, María José García-Pelayo, había firmado el contrato con la empresa Trafisa Construcción y Medio Ambiente S.A., que fue la adjudicataria del proyecto por un importe de 1,9 millones de euros (IVA incluido).
Justo ahora se cumplen cinco meses de la firma de ese contrato y otros cuatro del acta de inicio de los trabajos, a pesar de lo cual los vecinos apenas han observado movimiento en la parcela más allá de que se ha desbrozado arboleda y “se ha echado un poco de tierra” al terreno que debe convertirse en parque periurbano, que tiene nada más y nada menos que 82.000 metros cuadrados de superficie.
Parece poco bagaje para el tiempo transcurrido, por lo que algunos vecinos empiezan a temer que estemos ya ante un caso similar al de las obras del eje de Santiago, que ya desde su inicio empezaron a acumular un sensible retraso y que casi un año después se encuentran todavía pendiente de su finalización.
Ya el pasado mes de agosto, el portavoz del grupo municipal socialista, José Antonio Díaz, advirtió de que los trabajos no habían comenzado dado que en la parcela no había “ni trabajadores, ni caseta de obras, ni maquinaria”.
Entonces, el Gobierno local aseguró que la empresa adjudicataria había iniciado “los trabajos previos con la apertura del centro de trabajo, la aprobación del Plan de Seguridad, el levantamiento topográfico actual y los trámites para la ubicación de las casetas de obra”.
Al mismo tiempo, reconoció que la topografía del terreno había “sufrido modificaciones” desde que se redactó el proyecto “por intervenciones del anterior Gobierno municipal socialista”.
El caso es que desde que se ofrecieran esas explicaciones –el pasado 29 de agosto- ha transcurrido un tiempo prudencial sin que se tengan nuevas noticias del desarrollo de este ambicioso proyecto, que generó una gran ilusión en los vecinos del entorno de La Canaleja.
No hay que olvidar que estamos ante un proyecto de marcado carácter medioambiental que tiene como objetivo transformar todo el paisaje urbano de la zona, destinando una extensa superficie de 82.000 metros cuadrados a un gran parque concebido como espacio de ocio, esparcimiento y convivencia vecinal y familiar.
En este sentido, la intervención se plasma en una propuesta vegetal completamente integrada en su entorno, destinada a recuperar una parcela degradada que conecta la parte residencial con las instalaciones deportivas de la barriada y el parque aledaño, que se dotará todos los elementos necesarios para convertirse en un nuevo pulmón verde de la ciudad, con especies vegetales cuidadosamente seleccionadas y respetuosas con su hábitat cercano, y que generen superficies verdes con un uso eficiente del agua.
Cabe recordar que el proyecto contempla el mantenimiento de la cuenca originaria del antiguo arroyo de La Canaleja, respetando los itinerarios de cruce entre la zona residencial y la ribera opuesta donde se encuentran el actual parque y las instalaciones deportivas.
De forma más detallada, la actuación prevé la implantación de más de 1.500 árboles y se implementará, además, otra trama de arbolado en las zonas de estancia, destinadas a merenderos y bancos para generar un ambiente más agradable y fresco. Igualmente, el nuevo parque contará con itinerarios peatones y accesibles con iluminación adecuada, así como del mobiliario urbano correspondiente.
El plazo de ejecución de las obras –que se acomete con cargo al presupuesto municipal- es de 16 meses. Teniendo en cuenta que el acta de inicio se firmó el 7 de agosto, en condiciones normales el proyecto debería culminar a finales de 2024.
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