Jordi Pujol, presidente de la Generalitat de Cataluña entre 1980 y 2003, recibió este lunes la insignia de oro y brillantes del Barcelona, un reconocimiento que se otorga a todos los que cumplen 75 años como socios del club azulgrana.
El presidente del Barcelona, Joan Laporta, entregó la distinción a Pujol en un acto celebrado en el Auditori 1899, donde fue distinguido junto a otros trece socios, según anunció el club catalán.
"Se hicieron socios en una época de dificultades, en un país desmenuzado en plena posguerra. Les agradezco que, con ese gesto, adquirieran un profundo compromiso ético, social y democrático con el club y el país", destacó Laporta durante la entrega.
"Si somos el mejor club del mundo, es gracias a ustedes. Mientras yo sea presidente, el Barça seguirá siendo suyo, de sus hijos, de sus nietos y bisnietos", añadió.
Después del acto, en un ambiente distendido, el antiguo dirigente de Convergència i Unió explicó que fue en 1936 cuando vio el primer partido del Barça, justo antes de que estallara la guerra civil.
"El Barça me ha hecho sufrir mucho y también me ha dado muchas alegrías", señaló Pujol, antes de que Laporta le recordara el momento en que Hristo Stoichkov le hizo botar en una celebración en el balcón del Palau de la Generalitat, después de ganar la Copa del Rey en 1997.
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