En un reciente estudio de Eurostat, Andalucía se ha situado como la comunidad autónoma con la menor esperanza de vida en España, marcando una discrepancia significativa con otras regiones del país. Este contraste revela una España de múltiples realidades en cuanto a longevidad, a pesar de que el país goza de una de las esperanzas de vida más altas en Europa.
Andalucía, con 84,4 años para mujeres y 78,9 años para hombres, se encuentra en la posición más baja de este ranking interno, mientras que otras comunidades como Madrid y Navarra presentan cifras considerablemente más altas. Madrid lidera en longevidad con una esperanza de vida de 88,2 años para mujeres y 82,2 años para hombres. Navarra no se queda atrás, con 87,6 años para mujeres y 81,9 años para hombres, reflejando un sistema de salud robusto y políticas de bienestar efectivas.
El caso de Andalucía es especialmente llamativo en el contexto de España, un país que según el informe 'Health at a Glance 2023' de la OCDE, muestra una esperanza de vida promedio de 83,3 años. Las mujeres españolas, con una media de 88,5 años, tienen la mayor esperanza de vida dentro de la OCDE, y el país solo es superado por Japón a nivel mundial.
En otras regiones de España, la esperanza de vida también es notablemente alta. Cataluña, por ejemplo, muestra cifras de 86,6 años para mujeres y 80,7 años para hombres. Galicia, con 87 años para mujeres y 80,7 años para hombres, y el País Vasco, con 87 años para mujeres y 81 para hombres, también destacan por su alta longevidad.
En el norte de España, Asturias presenta 85,6 años para mujeres y 80,2 años para hombres, mientras que Cantabria tiene cifras de 87,1 años para mujeres y 80,9 años para hombres. En Navarra, la expectativa es aún mayor, con 87,6 años para mujeres y 81,9 años para hombres.
Las comunidades de la Meseta Central también presentan cifras impresionantes. Castilla y León registra 87,5 años para mujeres y 81,3 años para hombres, y Castilla-La Mancha 86,2 años para mujeres y 80,5 años para hombres. Estas regiones, conocidas por su calidad de vida y entornos menos urbanizados, reflejan cómo el estilo de vida y el acceso a servicios de salud de calidad pueden influir en la longevidad.
En la costa este, la Comunidad Valenciana muestra una esperanza de vida de 85,3 años para mujeres y 79,7 años para hombres, y Murcia con 85 años para mujeres y 79,7 años para hombres. Estas cifras, aunque inferiores a la media nacional, siguen siendo envidiables en el contexto europeo.
Las islas españolas tampoco se quedan atrás. Las Islas Baleares tienen una esperanza de vida de 86,3 años para mujeres y 81,1 años para hombres, mientras que en Canarias es de 85,8 años para mujeres y 80,7 años para hombres. Estos datos sugieren que el entorno geográfico y el estilo de vida insular también juegan un papel importante en la salud y la longevidad.
La Rioja y Aragón, con cifras de 86,3 años para mujeres y 80,7 años para hombres en ambas comunidades, demuestran la consistencia de la alta esperanza de vida en todo el territorio español.
Estas variaciones regionales en la esperanza de vida en España se deben a múltiples factores. El sistema sanitario español, aunque con un gasto por debajo de la media de la OCDE, es altamente valorado. Sin embargo, problemas como la obesidad y la diabetes varían considerablemente entre regiones y pueden influir en la esperanza de vida. Además, la contaminación, menor en España con 19 muertes por cada 100.000 habitantes en comparación con la media de la OCDE de 29, también juega un rol en estas diferencias.
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