Para realizar el seguimiento de la campaña, la Consejería ha dispuesto seis dispositivos, de los cuales cinco se van a integrar en estaciones fijas de la red de Vigilancia de la Calidad del Aire, y el sexto se ha instalado en una de las unidades móviles de esta red.
En su intervención, el consejero indicó que esta medida sienta las bases para preservar los hábitats naturales más sensibles a este tipo de impacto ambiental, evitar las intrusiones del alumbrado exterior en el ámbito privado, garantizar el buen funcionamiento de los observatorios astronómicos y mejorar la eficiencia energética.
La nueva normativa, señaló Díaz Trillo, establece la creación de un comité de carácter técnico, encargado de asesorar a las administraciones en la adopción de medidas para la protección del cielo nocturno. Este órgano estará integrado por cuatro consejerías de la Junta de Andalucía, la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, universidades públicas y determinados organismos científicos de relevancia nacional e internacional.
Con el asesoramiento de este comité, se ha zonificado el territorio andaluz para distinguir y limitar las áreas de tolerancia, con el fin de compatibilizar los intereses municipales y empresariales con los científicos, ecológicos y de ahorro energético.
Tal y como detalló el titular de Medio Ambiente, las mayores exigencias se aplicarán en las denominadas ‘áreas oscuras’, definidas como aquellas situadas en suelos no urbanizables de espacios naturales protegidos que albergan hábitats y especies sensibles al efecto perturbador de la luz. Entre ellas se incluyen también, con la consideración de puntos de referencia de máxima protección, los dos grandes observatorios astronómicos de alto nivel que se ubican en Andalucía: Calar Alto (Almería) y Sierra Nevada (Granada).
El segundo bloque de áreas estará integrado por todas las colindantes con las oscuras y por terrenos de espacios naturales no incluidos en ellas. Finalmente, como zonas de flujo luminoso medio se considerarán las residenciales con densidad media-baja de edificación, las zonas industriales y los espacios libres.
Díaz Trillo destacó también que serán los ayuntamientos los que, con el apoyo técnico de la Consejería, declaren en el plazo de un año las zonas de flujo luminoso reducido y medio. Para ello, la Consejería va a poner a disposición de la Administración local una herramienta informática sobre Google Earth, mediante la cual se propondrá la zonificación de toda la comunidad autónoma según los usos predominantes del suelo. La aplicación se pondrá en breve a disposición de los ayuntamientos mediante la web de la Consejería de Medio Ambiente. La delimitación de las zonas oscuras y puntos de referencia corresponden a la Junta de Andalucía.
La nueva norma regula también el diseño de las luminarias que, salvo en el entorno de edificios de especial interés patrimonial o cultural, deberán proyectar la luz de arriba abajo y evitar así su dispersión hacia las fincas colindantes y el cielo nocturno.
Para finalizar, el consejero de Medio Ambiente recordó que para garantizar el cumplimiento de esta norma se ha establecido un régimen disciplinario con sanciones que pueden ir desde los 30.000 euros hasta los 60.000 para las infracciones graves.
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