El Ejército israelí delimitó este miércoles una "zona humanitaria" en el sur de la Franja de Gaza, llamando a los habitantes del norte del enclave a trasladarse hacia ese punto, horas antes de la llegada a Israel del presidente estadounidense, Joe Biden, en plena guerra entre el Estado Judío y el grupo islamista Hamás.
"Las Fuerzas de Seguridad de Israel piden a los residentes de Gaza que se trasladen a la zona humanitaria de Al Mawasi, en la que se proporcionará ayuda humanitaria internacional según sea necesario", indicó un vocero del Ejército de Israel.
"Se recomienda acudir a las zonas abiertas en el oeste de Jan Yunis, en la zona de Al Mawasi", junto al Mediterráneo, recalcó.
Difundió un mapa en el que queda marcada una franja costera de algo menos de 6 kilómetros de largo y de entre uno y 1,5 kilómetros de ancho, con un área total de 7 kilómetros cuadrados.
Se trata de un área con numerosas casas bajas dispersas entre áreas agrícolas, invernaderos y descampados al noroeste de Jan Yunis, donde hasta ahora vivían unas pocas miles de personas.
En el caso de desplazarse hasta allí los 1,1 millones de residentes en la ciudad de Gaza y otras zonas en el norte de la Franja, que Israel ha exigido evacuar, cada personas tendría a su disposición, en teoría, un espacio de poco más de dos por tres metros.
El anuncio ocurre horas antes de la llegada a Israel de Biden, y un día después de que al menos 500 palestinos murieran durante un bombardeo contra un hospital en la ciudad de Gaza, del que Israel y las milicias palestinas se culpan mutuamente.
Este suceso, que supone la mayor masacre en el enclave de las cinco guerras que ha habido entre las milicias palestinas de Gaza e Israel desde 2008, ha sido duramente criticado por la comunidad internacional -incluido Estados Unidos- y encendió la furia de palestinos en Cisjordania ocupada y el extranjero.
Israel ordenó desde hace varios días la evacuación del norte de Gaza mientras sus bombardeos no han cesado en el enclave palestino y se prepara para la posibilidad de una incursión por tierra.
Pero la evacuación de 1,1 millones de gazatíes, la mitad de la población del enclave, ha sido sumamente difícil tomando en cuenta la peligrosidad y los daños en las carreteras, así como una crisis de escasez de combustible y el corte total de electricidad, agua y alimentos tras el cese de suministro de estos servicios por parte de Israel.
Además, Hamás ha tratado de impedir que los civiles evacúen las zonas del norte.
A pesar de los esfuerzos internacionales, hasta el momento no se ha abierto el cruce fronterizo de Rafah, entre Gaza y Egipto, donde numerosos camiones con ayuda humanitaria esperan el permiso para ingresar.
Israel y Hamás entran este miércoles a su décimo segundo día de guerra, que ha dejado al menos 3.000 muertos y 12.500 heridos en la Franja de Gaza y más de 1.400 muertos y más de 4.200 heridos en Israel.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es