El viernes de feria fue casi una calca del día anterior, con un recinto repleto de público deambulando de caseta en caseta, disfrutando de las reuniones, las orquestas y todo cuanto confluye en el interior de estos templos de la diversión. Una estampa que, sin embargo, demostró con creces aquello del ‘veranillo del membrillo” o “veranillo de San Miguel”, con casi 36 grados de temperatura en el arranque otoñal y con el siempre molesto viento de levante.
El viernes fue el día elegido para que la Asociación Deportiva, Cultural y Ecuestre El Parón hiciera entrega de sus premios a los mejores caballos y a los atuendos mostrados por jinetes y amazonas. En concreto, se reconocieron a los binomios caballos-jinetes-amazonas tanto en adulto como en infantil, así como al mejor conjunto caballo-jinete-gitana. Esta asociación ha contado con su propia caseta de feria que ha servido de nexo de unión entre sus numerosos socios y espacio de convivencia en torno a la gran afición local por el caballo.
De otro lado, y al tratarse del día del patrón, San Miguel, la vida pública se trasladó a la Basílica Menor de Santa María de la Asunción donde la Corporación municipal asistió a la tradicional misa.
Una jornada más, según la Policía, la feria de saldó sin incidencias reseñables, lo que apunta a la buena armonía teniendo en cuenta la avalancha humana que se produce.
Las propuestas del día
Este sábado tendrán lugar el concurso de baile por sevillanas organizado por el Ayuntamiento, la actuación de los jedulenses Eskombros y esta noche, a las doce, Juanlu Montoya en la caseta municipal.
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