La capital dio este jueves un paso definitivo para limitar, sobre todo en lo estético, los estragos que las despedidas de solteros pasadas de tuerca provocan en las calles del centro. Lo hizo, tras meses de trámites, con la aprobación definitiva de la modificación de la Ordenanza para la Garantía de la Convivencia Ciudadana y Protección del Espacio Urbano, tras resolver todas las reclamaciones y sugerencias presentadas.
La norma, ha recibido el sí definitivo en la Comisión de Derechos Sociales y Participación Ciudadana, y contempla la prohibición, salvo autorización, de “transitar o permanecer en la vía o espacios públicos sin ropa o únicamente en ropa interior; con ropa o complementos que representen los genitales del ser humano, y con muñecos/as o elementos de carácter sexual”, infracciones que a partir de ahora podrán ser sancionadas con multas de hasta 750 euros.
Esta modificación se justifica por la proliferación, en los últimos años, de determinadas conductas ligadas en su mayoría con celebraciones privadas, como es el caso de las despedidas de soltero y soltera, con la utilización exclusiva de ropa interior o de contenido erótico en los espacios públicos. Unas conductas ligadas a lo que se denomina el 'turismo de borrachera'.
El objetivo del gobierno municipal es contar con una nueva regulación que permita “preservar el espacio público como un lugar de encuentro, convivencia y civismo” y la ordenanza parte de “un principio de garantía de los derechos y libertades individuales y se ajusta a las medidas punitivas al principio de intervención mínima”, subraya el Ayuntamiento.
Por ello, las conductas individuales sólo se tipifican como infracciones en la medida en que afectan o impiden el libre ejercicio de las demás personas. “En definitiva, con esta nueva regulación se pretende poner freno a algunos comportamientos incívicos que puedan perturbar la convivencia entre los vecinos y visitantes de nuestra ciudad”, subraya el Ayuntamiento.
La ordenanza parte de “un principio de garantía de los derechos y libertades individuales y se ajusta a las medidas punitivas al principio de intervención mínima”, subraya el Ayuntamiento en un comunicado.
Ante una infracción contemplada en la nueva normativa, la policía en primer lugar informará a las personas involucradas respecto a la existencia de estas prohibiciones, y "sólo si se persiste en la actitud no permitida, se procederá a la formulación de la denuncia pertinente".
Málaga ha sido una de las primeras ciudades españolas en tratar de poner freno a la celebración de despedidas de soltero en la ciudad modificando sus ordenanzas municipales, como también están haciendo Logroño, León, Salamanca, Sevilla o Granada.
La ordenanza entrará en vigor una vez que el dictamen al que hoy ha dado luz verde la comisión de Derechos Sociales se apruebe en el próximo pleno municipal -el 27 de septiembre- y se publique en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).
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